Conviene respirar y contar hasta diez...

Carolina Bescansa culpa a los mayores de 65 años de los males políticos del país (por votar al PP, se entiende) mientras la ONU se empeña en celebrar pasado mañana, como todos los 1 de octubre, el Día Internacional del Mayor. Ese rollo beat de una parte de Podemos encabrona y puede llevar a la formación morada a terminar demasiado pronto dejando un bonito cadáver.

Conviene seguir respirando y contando, a ser posible con los ojos cerrados...

El PP se cachondea de su adversario caído en desgracia en su perfil de Twitter, comiendo palomitas mientras se desangra en la plaza pública el PSOE (con el que necesitaría un Gobierno de concentración para salvar España o del que ruega la abstención parlamentaria para conseguir la investidura de su candidato). La falta de elegancia y oportunidad del tuit resultaba tan escandalosa que éste fue retirado al poco de ser publicado. Lo que debió de aburrir mucho a Rita Barberá porque se durmió en su recién estrenado mixto escaño del Senado.

Respira, siente cómo entra el aire en tu cuerpo. Primero llenando el abdomen, luego el pecho, sin que suene la inspiración del aire en tu interior. Aguanta un segundo y luego cuenta diez mientras expulsas todo el aire haciendo el recorrido inverso. Respiración completa una y otra vez...

Felipe dice que Pedro (Sánchez, no el cabrero de Heidi que en una nueva versión se puede ver en el cine) le engañó. Le ha frustrado que le asegurara que, consciente de sus sólo 85 escaños, iba a abstenerse en segunda votación para no bloquear la investidura de Rajoy. Otros varones (no soporto lo de ´barones´ y su reminiscencia del Antiguo Régimen) autonómicos del PSOE exigen a Sánchez responsabilidades políticas ante el descalabro electoral del domingo pasado en Euskadi y en Galicia. Entre las mujeres con peso institucional, la presidenta de Baleares, Francina Armengol, apoya a Sánchez; Susana Díaz, en cambio, y como es archisabido y motivo de culebrón político, ha retado al fin a ´su´ secretario general al ofrecerse a estar delante del partido en un momento en que España la necesita más a ella que al aventurerismo de su compañero y enemigo, por intentar resumirlo chispa más o menos y con algo de chispa. Incluso Madina, quien disputó a Sánchez el ´liderazgo´ en las pasadas Primarias (que hubiese ganado si Susana Díaz le hubiese apoyado mejor) ha salido de la retaguardia, también en Twitter, para pararle los pies a su antaño rival ante la amenaza de éste de nuevas Primarias y el adelanto del Congreso socialista. Otra mujer, Adriana Lastra, del equipo de Sánchez, se enzarzó con Eduardo Madina en la red para defender a su jefe con el argumento de no dar ni agua a «la derecha», aunque se la den los votos, y toda esa verborrea caducada y poco creíble para una parte de la sociedad.

Urge respirar. Tras un año de elecciones sucesivas y la amenaza de otras generales en diciembre, sin que la economía despegue de verdad y nueve meses sin gobierno, urge respirar ante semejante espectáculo.