Oportunismo ilegítimo de Sánchez

Sánchez viene de sufrir las dos peores derrotas electorales del PSOE. Fue rechazado hasta por gran parte de los suyos, que no se fiaban de él. El pueblo español no le quiso ni de lejos. Su único «mérito» es ser un obsesivo anti-Rajoy, y ser visto como débil por los separatistas antiespañoles y los ex-batasunos, a cuyos votos debe su legal, pero ilegítimo poder. Su representante parlamentario y ministro Ábalos declaró que nunca harían una moción de censura con votos separatistas: mintieron. Sánchez y su PSOE han demostrado que no son de fiar para nada. Sánchez pretende dar lecciones de moral, haciendo una lectura sesgada de una sentencia judicial que no es firme, y siendo el suyo el partido con más dinero público malversado en corrupción. Sánchez es nulo en experiencia de gobierno: no ha sido ni alcalde rural. Nos presenta un gobierno pseudo-modernizador con felipistas y zapateriles, y además sobredimensionado y carísimo con diecisiete carteras. Lo suyo es el postureo, el laicismo inculto y la hueca palabra. Ahora encuentra la caja pública reparada para comprar voluntades y hacer electoralismo cortoplacista. Es temible que eutanasie España con la propaganda de una engañosa «muerte digna». Lo único digno y lo más democrático que le queda por hacer, es convocar elecciones cuanto antes. No se empeñe en gobernar a un pueblo que no le ha votado.

Pablo López López. Málaga