Dicen que hay que tener amigos hasta en el infierno. Personas a las que pedirles un favor en momentos complicados. La eterna rivalidad entre Sevilla y Málaga puede suponer una suspensión de las ´hostilidades´ esta semana con la visita del conjunto blanquiazul a tierras hispalenses para medirse a los ´cachorros´ de Nervión.

Claro que pedir por pedir no está bien. Por eso, el Málaga tiene un as guardado en la manga. El Sevilla nos debe una. En la temporada 98/99, cuando el Málaga y el Sevilla vivían caminos deportivos paralelos en Segunda División, el Málaga disputaba en la última jornada de Liga en La Rosaleda un encuentro intrascendente ante el Sevilla de Marcos Alonso. El equipo de Peiró ya estaba ascendido a Primera, era campeón de Liga, mientras que el conjunto sevillano necesitaba la victoria para meterse en la promoción a Primera.

El Málaga, con una Rosaleda llena, acabó perdiendo el encuentro por un discutido penalti que transformó Tsartas. El Sevilla ascendió de categoría gracias a la victoria en Málaga y posteriormente al Villarreal. En las gradas hasta se gritó "tongo, tongo".

Favor por favor. Ahora puede ser el momento de devolver el favor de entonces. El Málaga necesita la victoria en Sevilla sea como sea. Incluso el presidente del Sevilla, José María del Nido, manifestó ayer en una comparecencia en público su deseo de que el Málaga ascienda a Primera División.

"Con todo el respeto para los rivales que están en la posición de disputar la plaza de ascenso, quiero que el Málaga sea el quinto equipo andaluz en Primera, pero el fútbol es fútbol", admitió el presidente Del Nido.

Sin embargo, las palabras se las lleva el viento. Hay que recordar que el Sevilla recibiría 750.000 euros de la Real Sociedad si asciende a Primera División por la cesión de Martí.

Las declaraciones del presidente del Sevilla, aunque de buena voluntad, no demuestran nada. El Málaga se tendrá que jugar el ascenso con derecho propio en el terreno de juego. Además, la cercanía geográfica de los rivales del Málaga tampoco va a ser decisiva hasta el final de Liga, ya que excepto el Sevilla -que no se juega nada-, el Cádiz y el Granada 74 se juegan la salvación. El Málaga no deberá esperar favores.