Dicen que la Copa del Rey de baloncesto es el torneo más atractivo del deporte nacional por su carácter imprevisible. La verdad es que si nos ceñimos a la historia, es una competición muy abierta en la que casi cualquiera puede salir campeón, en la que casi nunca el favorito unánime en las apuestas levanta el trofeo, en la que casi nunca el campeón repite entorchado y en la que rarísima vez el anfitrión celebra el título ante su gente.
Lo que las estadísticas dejan muy claro es que el que llega líder de la Liga Endesa a la cita del k.o suele acabar levantando la Copa. Al menos así ha sido en los últimos años. Y es que en cinco de las seis últimas ediciones coperas, el equipo que llegó como primer cabeza de serie, como es el caso del Unicaja en esta cita de Las Palmas 2015, acabó llevándose el título.
Si a finales de la década de los noventa, equipos clasificados entre la quinta y la octava posición consiguieron levantar el trofeo de forma más o menos habitual, en las últimas diez ediciones, la sorpresa ha quedado algo más aparcada.
De hecho, el Tau Cerámica, en Madrid 2009; el Barcelona, en Bilbao 2010; el Barcelona, en Madrid 2011; el Real Madrid, en Barcelona 2012 y el Real Madrid, en 2014, llegaron como líderes y ganaron las respectivas Copas. En estos últimos seis cursos, solo el Barcelona, que fue séptimo al final de la primera vuelta en la campaña 2012/2013, se hizo con la Copa, en Vitoria 2013.
De igual forma que ser líder parece una «ventaja», ser cabeza de serie no asegura ni mucho menos pasar a los cuartos de final. En diez de las últimas doce temporadas alguno de los cabezas de serie cedió en su primer duelo de cuartos de final. En la pasada edición, sin ir más lejos, fue el propio Unicaja, jugando además con el factor público a favor, el que se vio sorprendido por el CAI Zaragoza.
Cabe destacar que ha habido campeones que se han clasificado en cualquiera de las ocho posiciones exceptuando la sexta, que esta temporada ha ocupado el citado CAI Zaragoza, curiosamente la misma plaza que ya ocupó la pasada campaña en su primera participación. Lo que nadie ha conseguido igualar es el hito que marcó el Unicaja de Sergio Scariolo en 2005, que ganó la Copa del Rey de Zaragoza tras haberse clasificado in extremis, en la última posición, la octava, al final de la primera vuelta liguera.
Unicaja y Real Madrid, enrachados
Otro dato estadístico que juega a favor de los intereses cajistas es que el Unicaja es, junto al Real Madrid, el equipo que llega a Las Palmas en mejor racha de victorias, tras ganar sus últimos cinco partidos ligueros de forma consecutiva.
La historia de la Copa del Rey indica que, en su mayoría, los campeones del torneo han llegado a la fase final ganando su último partido y con una muy buena racha de victorias. En esta edición cinco equipos llegan tras ganar en la última jornada (Unicaja, Real Madrid, Barcelona, Herbalife y CAI Zaragoza) y por lo tanto tres (Bilbao Basket, FIATC Joventut y Valencia) afrontarán el partido tras perder en su último compromiso de la Liga Regular, el pasado fin de semana.
Teniendo en cuenta esta estadística histórica, está claro que para este año hay dos grandes favoritos, el Real Madrid y el propio Unicaja, ya que son los dos únicos equipos que han sido capaces de ganar los cinco últimos partidos. Sólo tres equipos, el FIATC Joventut, CAI Zaragoza y Herbalife Gran Canaria, llegan con balance negativo en los cinco últimos partidos, pero hay que destacar que zaragozanos y canarios han ganado su último choque de Liga Regular.
En las diecinueve últimas ediciones de la Copa del Rey solo tres campeones llegaron al torneo perdiendo su último compromiso de Liga Regular. El último en lograr el título perdiendo su choque inmediatamente anterior fue el TAU Cerámica, en la edición de Madrid en 2009 -final que ganó en la prórroga al Unicaja de Aito García Reneses-.
El FC Barcelona dirigido por Dusko Ivanovic en 2007 y el mismo conjunto azulgrana liderado en la cancha por Pau Gasol, en Málaga 2001, son los otros dos equipos que ganaron la Copa del Rey tras perder su último encuentro de ACB.
Como se ve hay estadísticas para todos los gustos. Unas son buenas y otras, no. Pero lo que nadie puede dudar es que el líder de la Liga Endesa siempre llega a las Copas con un plus sobre el resto. Y el líder, en esta ocasión, viste de verde y morado y se llama Unicaja.
