El recinto donde se representa el Paso de Riogordo ha abierto al público tras las obras de rehabilitación que comenzaron en abril del año pasado. La actuación, con un coste total de 260.408 euros, ha sido financiada en un 90% (234.367 euros) por la Diputación de Málaga, y en un 10% por el Ayuntamiento de Riogordo, y ha servido para mejorar y embellecer el escenario de 8.000 metros cuadrados, que a partir de ahora podrá visitarse durante todo el año.

Así lo ha explicado el presidente de la Diputación, Francisco Salado, durante su visita institucional a Riogordo, donde ha visitado también el sendero de enlace entre el municipio y la Gran Senda y el obrador de repostería María Conejo para hacer entrega a sus responsables del distintivo de 'Sabor a Málaga'.

Salado, que durante la visita ha estado acompañado por el alcalde de Riogordo, Antonio Alés, ha querido recordar el compromiso de la Diputación con este municipio axárquico, al que durante el año 2019 destinó más de 580.000 euros para la mejora del alumbrado público en varias calles, obras en el polideportivo y en la piscina municipal y obras de mejora de caminos rurales, entre las actuaciones más destacadas.

El Paso de Riogordo, que se celebra desde 1951, es uno de los autos religiosos más destacados de España y se ha convertido en una de las señas de identidad de la provincia durante la Semana Santa y en un importante reclamo turístico para el municipio, cuyos vecinos se implican y colaboran para escenificar la vida, pasión y muerte de Jesucristo.

El recinto de El Paso tiene una superficie global, incluyendo el escenario natural y la zona de asientos, de 8.000 metros cuadrados. Las obras han permitido edificar una nueva portada, ampliar la fachada principal de acceso, construir un nuevo cerramiento con materiales más adecuados, demoler el puente decorativo de piedra y madera y construir uno nuevo con un sistema de recirculación de agua, y realizar pequeñas obras en los diferentes pórticos para mejorar su aspecto estético deteriorado.

También se ha reforzado la iluminación en todo el recinto con focos de menor consumo energético y se han instalado luminarias para destacar elementos singulares y para crear una iluminación ambiental y decorativa, y se ha construido una caseta para un mejor control del sonido y la megafonía durante la representación. Además, se ha dotado a todo el conjunto de cámaras de videovigilancia conectadas con una central, se han reformado los aseos y se ha creado un centro de visitantes aprovechando una edificación existente que contará con documentación gráfica, fotográfica y con una sala de proyección de vídeo.

También se han creado caminos y accesos desde la zona de espectadores hasta el escenario natural para que los visitantes, durante los días en los que no haya representación, puedan acceder a todos los lugares significativos del escenario, y se han construido dos puertas de acceso al recinto por la zona trasera del escenario para facilitar la entrada desde el exterior a los actores al principio o durante la representación.

El recinto, que se puede visitar de forma gratuita, estará abierto al público de 10.00 a 20.00 horas, y hasta las 22.00 horas durante los meses de verano.

Francisco Salado ha visitado también el nuevo sendero de enlace entre Riogordo y la Gran Senda, un proyecto aprobado por la Junta de Gobierno de la Diputación de Málaga en marzo de 2019 y cuyas obras, valoradas en cerca de 126.000 euros, acaban de finalizar.

La actuación ha servido para la mejora paisajística y la construcción de un sendero de enlace a la etapa 9 de la Gran Senda de Málaga, entre Periana y Alfarnatejo (Pulgarín Alto). Con una longitud de 750 metros, el sendero bordea el casco urbano de Riogordo por el margen derecho del arroyo de las Morenas y cruza un puente de reciente construcción, recorriendo un paisaje suave poblado de cereales y olivos. Se han pavimentado algunos tramos del recorrido, y en otros se han construido rampas y escalinatas para acceder desde el núcleo urbano. Además, como medida de seguridad, se ha colocado vallado de madera en el tramo de calzada, acompañando al acerado, y a ambos lados de las pasarelas. Para el resto del sendero, tanto sobre la escollera como sobre el terreno, se ha optado por una valla combinada entre postes y cuerdas de nailon. También se han instalado señales verticales en los tramos y desvíos más relevantes: uno al inicio del sendero, otro al final y dos en el tramo intermedio.