El alcalde de Torremolinos, Pedro Fernández Montes, ha dictado un decreto por el que ordena a la Comunidad de Propietarios Edificios Torresol a que en un plazo máximo de 72 horas proceda a la ejecución de los trabajos necesarios para garantizar la seguridad en la utilización del ascensor público conocido popularmente como «del Bajondillo».

Si los vecinos no acometen las obras de reparación de esta estructura, el Consistorio procederá de inmediato a la ejecución subsidiaria de dichos trabajos, con cargo íntegro a la comunidad.

Según fuentes municipales, esta orden del alcalde de Torremolinos se produce después del incumplimiento de los sucesivos requerimientos del Ayuntamiento, en enero de 2014 y enero de 2015, demandando a la comunidad la ejecución de los trabajos.

El ascensor se encuentra al lado de un talud deteriorado, a lo que habría que ponerle solución por la seguridad de los usuarios.

El ascensor público une la plaza situada a nivel de la calle Bajondillo con la existente a nivel de la avenida de las Mercedes, la plaza de los Tajillos.

El decreto de Alcaldía requiere el cumplimiento de la «reparación del parámetro citado, como mínimo en un ancho de cuatro metros desde la estructura del ascensor y en toda su altura».