Cuando parecía que todo estaba escrito sobre Pablo Alborán, este músico malagueño vuelve a romper esquemas. Tan sólo seis meses después de sacar su primer disco a la venta, Alborán tiene ya su segundo trabajo a punto de salir: un álbum grabado en directo en un concierto en acústico. Temas inéditos y colaboraciones con otros artistas son algunos de los alicientes del segundo retoño del artista del momento. A Pablo le espera un verano de todo menos tranquilo; su próxima parada, el viernes en el Castillo Sohail de Fuengirola.

Hace sólo seis meses que empezó su carrera, su disco ha batido récords de ventas, una gira que no termina… ¿Cómo ha vivido todo esto?

Lo he vivido de lujo, ha sido increíble; lo que pasa es que hay cosas que se han vivido muy rápido, con mucha prisa y a mí eso no me gusta nada. Por eso paramos un poco el carro y volvimos a reorganizar la manera de trabajar y desde entonces, súper bien. En febrero se disparó todo, las firmas de discos eran una locura, la promoción… Estoy muy agradecido por todo lo que me está pasando pero yo necesitaba hacer un alto en el camino, tomarme las cosas con calma y descansar.

Me sorprende que me diga que se ha relajado, no hay más que mirar su agenda...

Con relajado me refiero yo a nivel personal; soy un chico muy eufórico y todo me afectaba mucho: una firma de discos que saliera bien ya involucraba no dormir en toda la noche, y al día siguiente si tenia un concierto era otro día sin dormir… Al final todo esto te pasa factura, tuve un nódulo en la cuerda vocal, no fue nada grave pero sí me hizo reflexionar y pensar las cosas con calma. Me di cuenta que de que tenía que vivir todo con la emoción necesaria y disfrutar de este sueño del cual sigo sin querer despertar.

Acaba de grabar su próximo disco, un trabajo en directo y en formato acústico. ¿Cómo ha sido la experiencia?

Tenía muchas ganas porque la gente me lo pedía, querían escucharme en acústico, y aparte era un sueño que yo tenía. Mi primer disco lo hice con muchas ganas y estoy muy contento con el resultado, pero este segundo es como haberme desnudado un poquito más, te vas quitando los botones de la camisa y éste es un botoncito más. Ha salido algo precioso, muy bonito, tanto que hicimos llorar hasta el equipo técnico.

¿Qué nos vamos a encontrar exactamente en el disco?

Pues estará No te olvidaré, el tema que he creado para la campaña publicitaria de Andalucía, hay cuatro canciones inéditas y varias colaboraciones con artistas muy importantes, entre ellas una gran cantante de fado.

¿Cómo lleva Pablo Alborán el fenómeno fan?

Yo agradezco en el alma todo esto, me sorprende que la gente venga a los conciertos, que quiera verme, que quiera un autógrafo, me choca de verdad, yo soy un chico normal que hace música. A veces veo una especie de locura que agradezco pero necesito que me vean como a un chico de carne y hueso y que sepan que no puedo atender a las dos mil personas que me esperan a la salida de un concierto... Sólo espero que lo entiendan. Con esto no quiero decir que odie el fenómeno fan, al contrario.

Pero no todo es bueno, también se habla de usted como un producto sobreexplotado y en internet le llegan a comparar con el fenómeno Justin Bieber –ambos surgieron de las redes sociales–.

No me identifico con Justin Bieber, pero respeto a quien me compare a él. Claro que si me ven con la perspectiva del fenómeno Pablo Alborán, pues lo entiendo. Porque esto lo mismo que viene se va, y este año soy yo el chico que más suena en la radio pero el año que viene puede ser cualquier otro. Yo prefiero que me vean como a otra cosa; eso de fenómeno no me gusta, no quiero ser un artista más.

Se ha paseado por los escenarios de más de media España, y nos hemos enterado que en Tenerife Melendi y el Arrebato le hicieron una novatada….

¿Cómo sabe usted eso? [Risas] La verdad es que la noche de Tenerife fue increíble: yo era el chiquitillo que llegaba, el novato, pero todos me trataron con mucho cariño y como el hermano pequeño. Fue una noche muy divertida: Melendi y Javi de El Arrebato me escondieron la guitarra y al día siguiente tengo que reconocer que me costó encontrarla.

¿Cómo ha sido la experiencia latinoamericana, donde ya ha empezado a meter la cabeza?

He alucinado en colores, la gente me ha tratado con mucho cariño. Allí hay un gran culto a la música y hay una muy buena oferta. La acogida ha sido muy buena y quiero volver para hacer las cosas con más calma.

¿Qué supone para usted ser el pregonero de la Feria?

Cuando me lo ofreció el alcalde no me lo podía creer, fue impresionante. Era otro de mis sueños: yo estaba en la playa el año pasado y el anterior viendo los fuegos y escuchando el pregón y yo soñaba con estar ahí dando el pregón. Hay mucha gente que se lo merece más que yo, y por eso lo agradezco doblemente. Espero que a la gente le guste y lo sienta como yo.