El maestro venezolano Manuel Hernández-Silva, nuevo director titular y artístico de la Orquesta Filarmónica de Málaga (OFM), ha resaltado hoy la importancia de que el repertorio "llegue al público, porque es en definitiva el que otorga al arte la validez universal".

"Un maestro mío decía que la ópera china era de las cosas más bellas del mundo, pero los chinos oyen a Verdi en la temporada de ópera en Pekín", ha afirmado Hernández-Silva en su presentación como director de la OFM.

Por ello, intenta siempre "construir los proyectos sonoros sobre la base de la disciplina, la dedicación y el respeto", y que sea el público "el que decida el repertorio", porque "hay que cuidar mucho al público y no programar nada sin pensar en las consecuencias que puede tener lo que se está programando".

Respecto a su proyecto en la OFM, ha apuntado que "las grandes instituciones sonoras del planeta están construidas sobre la base de la memoria", mientras que una orquesta como ésta "ha salido de la adolescencia", con poco más de veinte años de historia.

"No podemos construir pretendiendo que hay una tradición que no tenemos, pero es hermoso construirla juntos", ha dicho el director, que apuesta por "una combinación muy concienzuda de todo el repertorio apto para la plantilla de la OFM, que es inmenso, sabiendo que la meta es la excelencia de la sonoridad".

Uno de los aspectos que más le ilusionan es la creación de la Academia de la Filarmónica, para la que promete la máxima dedicación y "apartar siempre fechas en el calendario".

"Todo esfuerzo con la juventud es poco. En mi formación musical, desde que era niño, se volcaron conmigo mis profesores en Caracas", ha señalado Hernández-Silva, que está trabajando para que en la Academia se celebren "al menos tres encuentros al año", y él se encargará de dos, para en el tercero "dejar a otro maestro y dar la oportunidad a los muchachos de tener otra perspectiva".

Después de haber dirigido la Orquesta de Córdoba entre 2005 y 2012, se ha felicitado por tener ya "una relación muy dilatada con Andalucía, porque lo ha querido así el Altísimo", y asegura que esta región le ha tratado "de maravilla".

Sobre su primer contacto con la OFM ante el público, que se producirá el viernes y el sábado en el Teatro Cervantes de Málaga, el maestro venezolano ha confesado que "la mayor emoción es poder compartir escenario" con el barítono Carlos Álvarez, que es una de las voces que más ha "admirado".