Hasta el más veterano puede cometer un error. Más de una vez se ha visto a un jugador del tour ser descalificado o amonestado por cometer un fallo a la hora de aplicar las reglas. Pues ayer fue a Miguel Ángel Jiménez, con el liderato en juego, al que se le fue el santo al cielo. El malagueño (-17) mantuvo finalmente el tipo tras un gran duelo con Edoardo Molinari (-14), pero no se libró de un buen susto en la tercera jornada del Masters Europeo de golf, que se juega en Crans su Sierre (Suiza).

Jiménez no ganó por la mano al italiano, su directo rival, por un inusual despiste en la calle del hoyo 10. El malagueño había pegado una buena salida, pero al llegar hasta su bola la colocaba levantándola del lugar donde reposaba. Su stance lindaba con una boca de riego en mitad de la calle y Jiménez directamente inició la maniobra de dropaje sin penalidad, sin caer en la cuenta de que finalmente dicha boca de riego no influía en su posición. «Ha sido una pena. He levantado la bola y entonces me he dicho, ¿pero qué estás haciendo?», comentaba al finalizar. El caso es que ese golpe de penalidad le privó de entregar un 67 que le hubiese dado cuatro golpes de ventaja sobre el italiano.

Lo peor de estas cosas en el golf es que suelen pasar una factura más cara que un solo golpe. De hecho, desde aquel momento se vio a Jiménez más tenso en el campo. Hasta ese momento, venía como una moto: cuatro birdies por los primeros nueve hoyos. A los nueve segundos acabó firmando uno arriba para el -3 del día y el -17 total. Algo positivo fue su final, ya que firmó un gran birdie al 18 que de algún modo endulzaba el mal trago.

A falta de que se disputen los últimos 18 hoyos y aunque las predicciones en el golf sirven más bien de poco, la cosa parece que ha quedado limitada a los cuatro primeros. Jiménez (-17), Molinari (-14), Matteo Manassero (-13) y Steve Webster (-13). El resto viene ya a partir del -10, muy lejos del líder.

Del resto de españoles, además del -8 de Pablo Martín, destacar el -7 de Rafa Cabrera Bello. El canario, simplemente con entrar entre los quince primeros, ya se aseguraría la tarjeta 2011. El día no fue tan bueno para Nacho Garrido (-5, tras un 72 ayer) y el también malagueño Alejandro Cañizares (-1 tras un 74).