Juego, estrategia, concentración y habilidad forman las bases del ajedrez. Un deporte que está consiguiendo desterrar el mito de que sólo es apto para personas inteligentes, ya que existen estudios que demuestran que es precisamente su práctica lo que hace a sus jugadores desarrollar esa capacidad. Los resultados lo demuestran: los escolares que juegan al ajedrez sacan mejores notas.

Prebenjamines, benjamines y alevines son las categorías que conforman la Escuela Deportiva Municipal de Ajedrez, dirigida a los niños malagueños entre 6 y 11 años. Las clases se imparten en la delegación malagueña de la Federación Andaluza de Ajedrez, ubicada en calle Malpica, dos veces por semana. En las sesiones, de hora y media de duración, se enseña el movimiento de piezas, la defensa, apertura, el juego medio y las finales. El entrenamiento está dirigido por Carlos Gutiérrez, monitor nacional de ajedrez.

Los beneficios sociales y psicológicos de este juego son «todos», según María Victoria López, coordinadora de la Escuela y presidenta de la delegación malagueña de la Federación Andaluza de Ajedrez. Y es que, aunque se trata de un juego individual, «el sentimiento de respeto y compañerismo es una regla básica, incluso más que en otros juegos». Además, desde que comienza la partida se pone en marcha la capacidad de decisión, concentración y responsabilidad, «por lo que podemos decir que ayuda a todos los niveles de la personalidad», apunta la coordinadora. Aunque no existe una edad determinada para empezar a practicar este deporte, «una edad recomendable sería de cinco a seis años».

Como en cualquier deporte, lo más complicado para los alumnos es «aprender a perder», además de memorizar las aperturas. En cambio, las satisfacciones llegan a medida que se progresa en el juego, donde lo más divertido es entrar en competición. «Lo que más me llama la atención son las caras de los alumnos cuando ganan su primera medalla, su orgullo y satisfacción es algo sin igual», comenta María Victoria López.

En este sentido, los alumnos que componen la EDM de Ajedrez participan en diferentes campeonatos municipales, provinciales, regionales y nacionales. Todo ellos se desarrollan por edades con seis trofeos por categoría (tres masculinos y tres femeninos). También se organizan torneos en 22 municipios malagueños junto a otros que celebra la propia Delegación Malagueña de Ajedrez. Tanto en los Juegos Municipales como en los campeonatos provinciales y regionales los alumnos de la Escuela han obtenido varios primeros puestos. «Cualquier alumno puede dar la sorpresa en unos campeonatos y eso estimula en gran medida su progreso, ya que les impulsa a seguir trabajando», apunta la coordinadora.

En el ajedrez, cualquier jugador puede convertirse en una figura, ya que todo es cuestión de trabajo. «En la Escuela Deportiva se inician y el progreso viene influido por muchas circunstancias: colegio, deportes, amigos, padres, etc. Pero lo de ser una figura es lo de menos, lo importante es que es un deporte al que se puede seguir jugando a cualquier edad y practicar lo aprendido», manifiesta la coordinadora.