­Son los últimos en presupuesto pero los primeros en ilusión y ganas. Los paleños firmaron ayer una goleada que les permite ocupar la segunda plaza en la clasificación y, quién sabe, si soñar con algo más que la permanencia. El conjunto malagueño dio ayer un recital ante uno de los equipos fuertes de la categoría y superó a La Balona con tres goles de Juanillo y dos de Durán.

No tuvo El Palo un comienzo muy fácil. Los quince primeros minutos de juego fueron un sin vivir para la afición paleña, que veía como el equipo rival gozaba de más ocasiones y más claras. No se había acomodado la gente en el asiento cuando el conjunto gaditano ya avisaba a Pol con un disparo que besó la escuadra. El mayor susto estuvo en las botas del senegalés Fall, que falló un mano a mano con el portero catalán de El Palo.

Un minuto después de estar en el infierno, Marín le dio alas a los paleños. El gaditano sacó su guante derecho de paseo y puso un balón en la escuadra que quitó las telarañas. San Ignacio se está convirtiendo en sinónimo de buenos goles. Y de hecho, el segundo también lo fue: un arranque «maradoniano» de Juanillo, que dejó atrás a todos los rivales que se interpusieron en su camino, acabó con el balón entre las mallas tras un buen derechazo. El canterano malaguista jugó hoy con un punto extra de motivación debido a la presencia en las gradas de su hermano Apoño.

Los aficionados paleños vibraban y tenían una buena razón para ello. Los jugadores locales estaban protagonizando un auténtico espectáculo de goles y juego y sometieron a su rival, que no era un cualquiera: el tercer clasificado y uno de los principales candidatos para estar entre los cuatro primeros.

La segunda parte fue un mero trámite para los pupilos de Rafa Muñoz, que brindaron a la grada el mejor partido hasta el momento en la temporada. Juanillo no se conformaba con haber realizado una de las jugadas del fin de semana. El malagueño demostró que no solo tenía una magnífica calidad sino que también gozaba de una puntería excelsa, colocando el balón en la escuadra.

Marín quiso quitarle algo de protagonismo al extremo marcando otro gol maravilloso desde bastante lejos. Los jugadores de El Palo se permitían hacer cualquier cosa porque hoy les salía todo. El «11» paleño firmaba el «hat-trick» que ponía fin a un partido que al principio auguraba malas noticias.

@BorjaMDiez