Alejandro Davidovich Fokina sigue intratable y pretende despedirse de la temporada 2020 de la mejor manera posible. El malagueño cumplió en su partido ante el francés Benjamin Bonzi y se ha plantado en los octavos de final del Masters 1000 de París-Bercy. Dos sets por 6-4 y 6-4 fueron suficientes para certificar su cuarto triunfo en suelo parisino y se verá las caras ante Diego Schwartzman, verdugo de Fokina en cuarts de final de Colonia, en la derrota más dura para él hasta la fecha.

El tenista entrenado por Jorge Aguirre se medía con un jugador invitado por el torneo, en una posición más baja en el ranking (180), pero que no lo puso sencillo. En el primer set el malagueño rompió la igualdad llevando el break decisivo con 3-3 en el marcador. Aprovechó este punto de inflexión para hacerse fuerte en su servicio, asegurando los juegos en los que dispuso del saque para llevarse por 6-4 la manga. Se le vio centrado y poco errático a 'Foki', que vanía de ganar a todo un número 19 del mundo como Khachanov en tres sets.

El segundo capítulo del partido no comenzó de la mejor forma para el tenista de 21 años, que regaló su saque y pareció hincar rodilla frente a un Bonzi que se imponía por 3-0.A partir de entonces, mejorando el espacto mental, se recompuso y consiguió remontar con un juego serio y contundente. Otro 6-4 y a octavos.

«Estuve dos días bastante tocado, en mi casa, sin hablar con nadie», decía Davidovich el martes, refiriéndose a la dura derrota ante Diego Schwartzman en cuartos de Colonia, cuando tenía el partido ganado con 6-2, 5-2 y saque a favor. «A raíz de la derrota con Diego cogí un impulso grande», asegura Davidovich, que hizo de aquel batacazo una manera de reforzarse. De momento, este triunfo le asegura estar en el Top 50 del ranking, su mejor posición hasta el momento. Su progreso sigue siendo a pasos agigantados.