Previsiones económicas

La OCDE sube al 1,5% la previsión de crecimiento de España para este año

El organismo internacional mejora en una décima su estimación para el PIB español en 2024 y mantiene en un 2% la del 2025

La OCDE sube al 1,5% la previsión de crecimiento de España para este año.

La OCDE sube al 1,5% la previsión de crecimiento de España para este año. / EP

Enric Bonet

La previsión de un frenazo en la economía española se estabiliza. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha aumentado ligeramente hasta el 1,5% el crecimiento previsto este año del Producto Interior Bruto (PIB) de España, que creció un 2,5% en 2023. Tras haber rebajado en cinco décimas ese mismo dato en noviembre, este organismo internacional mejora del 1,4% al 1,5% su estimación para el PIB español, según sus últimas previsiones publicadas este lunes.

Como el resto de los principales países de la Unión Europea, España sufrirá una fuerte ralentización, sobre todo a causa de las políticas monetarias del Banco Central Europeo —elevados tipos de interés— para frenar la inflación. Este será probablemente el año con un menor crecimiento del PIB español desde 2014, eludiendo el 2020 marcado por la pandemia del coronavirus y el confinamiento. 

Las previsiones de la OCDE van en la misma línea que otras publicadas recientemente por el Banco de España o el centro de reflexión Funcas, pero resultan claramente inferiores al objetivo del 2% fijado por el ministro de Economía español, Carlos Cuerpo. En cambio, el organismo internacional, con sede en París, sí que prevé una subida del 2% del PIB español para 2025, la misma estimación que hacía en noviembre.

Crecimiento superior al de Francia o Alemania

Pese a la más que probable desaceleración, el PIB español resiste mejor a la actual coyuntura que los principales países de la Unión Europea. La OCDE prevé unas subidas raquíticas para Francia (0,6%), Italia (0,7%) y Alemania (0,3%). El país teutón, principal locomotora económica del Viejo Continente, saldrá al menos de la recesión del año pasado, aunque el órgano empeora su anterior estimación en tres décimas. La zona euro seguirá con la misma tendencia que en 2023 y crecerá un 0,6% este año. De hecho, los países de la UE corren el riesgo de quedar descolgados respecto a las principales potencias, sobre todo Estados Unidos y China. 

Después de haber terminado el año pasado con un sólido crecimiento del 2,5%, la OCDE mejora en seis décimas su estimación para el 2024 y considera que el PIB estadounidense aumentará un 2,1%. En el caso de China, aunque sufre una crisis inmobiliaria, mantiene el mismo pronóstico que en noviembre: un 4,7% en 2024 y 4,2% en 2025.

Pese a las sanciones occidentales tras la invasión rusa de Ucrania hace casi dos años, la economía de Rusia ha resistido a esas medidas y el organismo mejora en siete décimas su estimación de crecimiento (1,7%), después de un 3,1% en 2023. En total, la OCDE estima que el PIB mundial crecerá un 2,9%. “Será el tercer año consecutivo con una moderación del crecimiento”, asegura en el informe.

¿La situación en el mar Rojo afectará la inflación?

Aunque la coyuntura actual está marcada por la desaceleración, el lado positivo es que se ve la luz al final del túnel de los últimos años de elevada inflación. "Debería estar bajo control en la mayoría de los países del G20 a finales de 2025”, indica la OCDE. Esto se ve propiciado por los elevados tipos de interés, así como por la disminución del precio de la energía y las materias primas. Si no se tienen en cuenta los datos de Argentina y Turquía —países con una tendencia inflacionista superior al resto—, la subida de los precios se moderará en el G20 del 3,6% el año pasado al 2,6% en 2024 y el 2,4% en 2025. 

No obstante, esta dinámica podría verse afectada por las tensiones geopolíticas mundiales. En concreto, por los ataques de los rebeldes hutíes de Yemen a embarcaciones comerciales con intereses vinculados a Israel, en respuesta a la devastadora guerra de Gaza, que ya ha provocado la muerte de más de 27.000 palestinos y unos 1.200 israelíes. La situación en el mar Rojo, por donde pasa un 15% del comercio marítimo mundial, representa “un riesgo significativo para la actividad y la inflación”, advierte la OCDE. 

Los ataques de los hutíes ya han encarecido el transporte marítimo. En el caso de que se perpetúen a lo largo de este año, incrementarían en un 0,4% la inflación, según el estudio. La tendencia inflacionista pospandemia ya se vio acentuada por la guerra de Ucrania y ahora podría alargarse por otro conflicto bélico.