La Sirena recupera el pulso y regresa a los 178 millones de euros en ventas en 2023

La estrategia para reflotar La Sirena parece que empieza a dar sus frutos. La cadena tradicionalmente conocida por la venta de alimentación congelada termina 2023 con algo más de volumen de facturación que el año anterior y con avances sustanciales en su camino hacia la rentabilidad. Y así, si todo va según lo previsto, la compañía ahora propiedad del empresario José Elías (Audax) espera pegar el acelerón definitivo este 2024, cuando ya prevé batir el récord de ventas que registró en 2021.

En concreto, según un comunicado difundido este lunes, la empresa vendió por valor de 178 millones de euros este año pasado, lo que supone incrementar menos de un 2% los ingresos del ejercicio anterior, pero recuperar un pulso que parecía que se perdía entonces (en 2022 el volumen de negocio de La Sirena se redujo ligeramente) y que coloca a la empresa frente a su mayor cifra de ventas hasta la fecha, los 179 millones que registró en 2021.

Además, el ebitda, el resultado bruto antes de descontar el pago de impuestos, amortizaciones y demás gastos contables, mejora un 10% respecto al del año previo. De acuerdo con estos datos, el negocio da actualmente 7,8 millones de euros brutos, una estampa que los responsables de la compañía rematan subrayando que han reducido en 8 millones de euros la deuda financiera acumulada (5,7 millones).

Incluso así, el dueño de La Sirena ha inyectado recientemente otros 4 millones de euros a su capital, con el fin de garantizar el equilibrio en las cuentas que persiguen desde hace años.

Planes para 2024

"A lo largo de estos años hemos demostrado que la compañía posee una gran proyección y potencial de crecimiento", asegura su director general, Xavier Lafitte. "Nuestra prioridad de cara a 2024 es seguir con la tendencia positiva y reforzar la trayectoria en la que venimos trabajando, potenciando una estrategia omnicanal, innovadora en materia de producto y responsable con nuestros clientes y entorno", agrega el directivo.

En concreto, la proyección que plasma este lunes la cadena es alcanzar los 185 millones de euros en ventas y elevar algo más el ebitda hasta los 8,5 millones de euros. Parte de la estrategia para lograrlo reposará en mantener la línea de transformación de tiendas y seguir apostando por las referencias en seco (el producto no congelado).

De las 275 tiendas que tiene actualmente abiertas La Sirena, una veintena ya complementan sus referencias congeladas con productos como pan, galletas, especias, aceite, caldo, 'snacks'... El objetivo –apunta Lafitte en este comunicado– "es facilitar una compra completa, económica, equilibrada y saludable, manteniendo nuestra esencia como especialista del congelado". Así, en 2024, la empresa prevé seguir llevando el modelo a otras tantas tiendas.

En paralelo, La Sirena prevé lanzar a mediados de este año una nueva web y aplicación de compra para proporcionar a los clientes "una experiencia de compra más ágil, transparente y beneficiosa", lo que probablemente redundará en un incremento de las ventas 'online' que en 2023 ya ha marcado un 10% de crecimiento.