Un nuevo caso estafas realizadas con tarjetas de crédito clonadas ha propiciado una espectacular operación policial que ha finalizado con un total de 24 detenidos. Sin embargo, el dato más relevante de esta investigación es que el total de los detenidos por la Policía Nacional son responsables de comercios y empresas acusados de colaborar con una red de falsificación de tarjetas de crédito.

Según anunciaron ayer desde la Comisaría Provincial de Málaga, la cantidad de dinero defraudada por los implicados podría rondar los 3.500.000 euros, principalmente en municipios de la provincia de Málaga.

En la información de esta investigación, que fue remitida ayer en un comunicado por la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil, se detalla cómo los detenidos colaboraban con terceras personas que se dedicaban a clonar de tarjetas de crédito y contrataban datáfonos con tecnología GPRS para «pasar» las tarjetas desde el propio vehículo de los falsificadores.

Las pesquisas, según la propia policía, se iniciaron en julio del año pasado a raíz de informaciones obtenidas por los agentes que apuntaban a la presencia en la localidad malagueña de Alhaurín el Grande de un grupo organizado de falsificadores de tarjetas.

En los primeros pasos de la investigación, los investigadores ampliaban el radio de acción de esta organización a otros municipios de las provincias de Cádiz y Sevilla.

«Se trataba de especialistas en duplicar tarjetas y que además disponían de una gran capacidad para captar e integrar en el seno de la organización a responsables de comercios y empresas para que actuaran en connivencia, previo acuerdo económico, realizaban operaciones fraudulentas con las tarjetas falsificadas», apuntaron las fuentes policiales, quienes añadieron que ambas partes se repartían posteriormente los beneficios obtenidos «al 50%».

Dentro del modus operandi, la policía averiguó que, una vez que el líder disponía de las tarjetas falsificadas, se dedicaba a acordar con los comerciantes desplazamientos para utilizarlas.

El abanico de los negocios era amplísimo, razón que explica las grandes sumas de dinero que conseguían defraudar en diferentes puntos de la provincia de Málaga. «Esta persona contaba con la colaboración de tiendas de moda de lujo, náutica, clubes de alterne, estancos, refrigeración, mobiliario, hostales, restaurantes o inmobiliarias», recalcaron desde la Comisaría Provincial de Málaga.

El mapa de los negocios, según la investigación de las autoridades, incluye municipios como Vélez Málaga, Torremolinos, Málaga, Alhaurín el Grande, Coín, Estepona, Fuengirola, Málaga, Mijas Costa, San Pedro de Alcántara y Antequera y de la provincia de Cádiz (La Línea de la Concepción y Los Barrios) a los que el propietario de las tarjetas clonadas se trasladaba en «un vehículo de lujo último modelo».

«Muchos de estos establecimientos habían acumulado importantes cantidades de fraude, superando en algunos casos los 130.000 euros, y el fraude total consumado 1.250.000 euros, aunque se estima que podría alcanzar los 3.500.000 de euros», sentenciaron las fuentes.