La calidad del aire en Málaga es mala o muy mala en uno de cada dos días del año, según un estudio realizado por el Observatorio del Medio Ambiente Urbano (OMAU) y que tiene en cuenta las mediciones de las tres estaciones situadas en Campanillas, El Atabal y Carranque.

Los datos recopilados muestran cómo el año 2009 fue el peor de la última década con 181 días en los que se superaron los límites aceptables de contaminación, atmosférica, la misma cifra que en 2006, superando los datos de otros años anteriores y con una tendencia al alza.

Las emisiones de partículas y el CO2 son las emisiones más comunes que se registran en la ciudad, que al menos cuenta con niveles muy bajos de otro tipo de contaminación más nociva, como la que produce el dióxido de nitrógeno (NO2) o el dióxido de azufre (SO2). Precisamente las emisiones del primero, que sale de los tubos de escape de los coches, han encendido las alarmas recientemente en Madrid y Barcelona, donde se rebasan ampliamente los niveles de la UE y se están estudiando una serie de medidas para reducir su presencia en la atmósfera. En el caso de Málaga, el valor medio se sitúa en 22 microgramos por metro cúbico, cuando el límite de la UE es 40. De hecho, sólo se superó ese límite en 2 días al año, cuando el máximo recomendado son 18 días.

El caso del SO2 es distinto, ya que las principales fuentes de este gas son las centrales térmicas o refinerías, así como algunas industrias de transformación minera, que no hay en Málaga, por lo que su presencia es testimonial.

Polución

Respecto al CO2, la producción de energía es responsable de la mayor parte de los 1,98 millones de toneladas que corresponden a la ciudad, según los cálculos del OMAU, quien señala que equivale a 3,43 toneladas por habitante.

El sector energético fue responsable de la emisión de 1,42 millones de toneladas de CO2 en el año 2009 en la ciudad, una cifra que supone un descenso del 30% respecto a los datos de 2007, cuando se alcanzó el tope histórico de emisiones. La crisis se encuentra detrás de este paulatino descenso de polución achacable al CO2, ya que la menor actividad industrial ha reducido de forma considerable el consumo energético.

Por sector, la industria genera la parte principal de la polución, con 996.346 toneladas de CO2 en 2009, frente a las 316.351 toneladas del uso residencial o las 284.488 de la agricultura.

El transporte es otra de las fuentes de polución, siendo responsable de la cuarta parte de la presencia del CO2 en la ciudad, con 556.152 toneladas durante el año pasado.

El tráfico del vehículo privado es la principal fuente de contaminación dentro del transporte, ya que es achacable a ellos el 85,4% de las emisiones de dióxido de carbono del transporte. Una cifra que ha bajado de forma considerable desde 2007, debido a la menor cantidad de tráfico que circula diariamente por Málaga. Es llamativo este hecho, en tanto que 2007 los coches emitieron 551.000 toneladas, frente a las 475.000 de 2009. De forma paralela, el tráfico se redujo en más de un 20% en el mismo periodo.

El autobús urbano y el tren de Cercanías se aupan como los medios menos contaminantes, mientras que el puerto y el aeropuerto han reducido sus emisiones por la crisis