El concejal de Urbanismo y la jefa del departamento de Disciplina Urbanística se reunieron en la tarde de ayer con una veintena de los afectados por sanciones en la urbanización Reserva de San Antón, con la idea de buscar soluciones que, dentro de la aplicación de la ley, permita ser templados en su aplicación. Los infractores, según indicó el concejal Diego Maldonado, admiten que han construido ilegalmente y entienden que ahora Urbanismo aplique la ley. En reuniones anteriores con ellos y con sus abogados ha habido negociaciones con la idea de trabajar para restituir lo legalizable y «sancionar sólo lo justo». Esto ha permitido que algunos infractores estén demoliendo lo levantado ilegalmente y que en ningún caso podría legalizarse.

En todo caso, el concejal explicó que no hay ninguna situación de caza y captura, que en la zona Este se trabaja en la misma línea que en otros distritos y que la labor inspectora es «similar» a la del resto de Málaga. «No hemos ido a buscar la infracción, sino que los casos han sido tan evidentes que no tenemos más remedio que actuar y además, una vez que detectamos un caso, comprobamos si hay más para que no ocurra que unos queden sancionados y otros impunes». No hay, además, mayor nivel sancionador en esta parte de Málaga, al contrario, señaló Maldonado, hay mayores índices de expedientes sancionadores en zonas como Campanillas o Puerto de la Torre que en la zona Este.