La primera jornada de la huelga de los médicos andaluces se desarrolló con disparidad de datos, ya que el Sindicato Médico Andaluz (SMA) cifró el seguimiento en un 50% mientras que la Junta aseguró que sólo la secundaron 41 de 1.895 facultativos, es decir un 2,16%. Para el turno de tarde, la Junta rebajó aún más la cifra al asegurar que sólo hicieron huelga tres médicos de un total de 461, un 0,65%.

El presidente del SMA, Gerardo Ferreras, denunció los servicios mínimos «abusivos» que se han impuesto, de hasta el 100% en algunos servicios, lo que provocó que, por ejemplo, en un ambulatorio de catorce trabajadores sólo tuvieran posibilidad de secundarla cinco. La Junta de Andalucía ha asegurado que los servicios mínimos establecidos suponen el 27% de los profesionales.

Los paros se llevarán a cabo hasta junio de forma periódica y rotando por provincias y hospitales para protestar principalmente por que el aumento de jornada laboral se haga a costa de horas extraordinarias. La jornada de huelga afectaba a los centros sanitarios de Sevilla, Hospital Virgen del Rocío, Hospital de Alta Resolución de Utrera, Distrito Sanitario Sevilla, Equipo de Emergencias de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias con base en el Hospital Virgen del Rocío, Triana y Centro Coordinador de Sevilla.

La consejera dijo el domingo que la huelga era de «diseño» por lo «fragmentado» de los paros en función de provincias, hospitales, distritos y centros, y el «nulo interés mostrado» en llegar a un acuerdo «persigue beneficiar mediáticamente al PP, haciendo un ruido permanente hasta junio».

«El sindicato médico siempre ha mantenido como punto innegociable el que el aumento de jornada laboral se aplicase incrementando en media hora más la jornada laboral ordinaria de lunes a viernes, pero que no a costa de las guardias». El PP-A reclamó ayer «respeto» para la huelga y rechazó las acusaciones de la consejera de Salud, María Jesús Montero, de que se trata de una movilización «de diseño, para hacer ruido».