La Marea Verde tomó ayer el Centro de la ciudad. La histórica jornada de huelga educativa contra los recortes y la reforma que promulga el ministro José Ignacio Wert se completó con una multitudinaria manifestación desde la plaza de la Constitución hasta la plaza de la Merced. Una marcha compacta que discurrió por avenidas que se quedaron pequeñas, incluso los seis carriles del Parque. De hecho, mientras que la cabecera ya iba por el Rectorado, la cola aún no se había echado a andar y seguía en la plaza de la Constitución. Miles de personas, más de 15.000 según los convocantes, componían la marcha contestataria, poniendo en evidencia la unidad de la práctica totalidad de la comunidad educativa en contra de la LOMCE y de los recortes, que también está aplicando la Junta de Andalucía.

La conocida como Ley Wert, la octava ley de educación de la democracia, ha puesto en pie de guerra a casi todos, porque no es una ley que haya nacido del consenso, según denuncian. Ayer también estaban presentes los sindicatos CSIF y ANPE, que hasta ahora no se habían sumado a las movilizaciones, lo que provocó en principio la reacción del Sindicato de Estudiantes, que no obstante ayer también se sumó a la manifestación. Al llegar a la plaza de la Merced, varios alumnos leyeron el manifiesto conjunto con el que exigen la retirada del anteproyecto de ley.

La huelga general contó ayer con un seguimiento masivo en los colegios e institutos de la provincia. Es el segundo paro general al que han sido llamados todos los niveles educativos, desde las guarderías hasta la Universidad, después de la huelga del 9 de mayo. En esta ocasión, se han superado aquellos registros de participación, según los sindicatos.

La mitad de los profesores de la enseñanza pública de la provincia de Málaga apoyó la convocatoria y no acudió a su puesto de trabajo. La incidencia fue mayor entre los docentes de Secundaria que en los de Primaria.

Los profesores que optaron por ir a su centro educativo tampoco tenían alumnos a los que enseñar. La participación de los estudiantes fue casi total en los institutos. Por encima del 98% en algunos casos, como pudo comprobar La Opinión de Málaga.

Según explicó Encarna de la Chica, secretaria general de educación de FETE-UGT, sólo fue a clase un 10% del alumnado. La media de la provincia se vio reducida porque la incidencia en Primaria fue menor. Unos 371.000 alumnos de todos los niveles educativos de la provincia estaban llamados a la huelga. Incluso los menores de Infantil y Primaria, aunque en estos casos el llamamiento estaba dirigido a los padres, para que no los llevaran a clase.

Por su parte, los profesores convocados superaban los 17.000. Según los sindicatos, el seguimiento también fue mayor entre los docentes de instituto que entre los maestros de Primaria. Entre un 40% y un 50%.

Aunque la Delegación Territorial de Educación compartía el dato de participación del alumnado, reducía de forma considerable, hasta un 20%, la participación de los profesores.

En institutos, como el IES Mare Nostrum, de la capital, sólo fue a trabajar el 46% de la plantilla docente. Los profesores que se sumaron a la huelga dejarán de ingresar este mes en sus nóminas entre 60 y 100 euros (lo que le descuenta la Administración, en función de su antigüedad, complementos o cargo). «Creemos que esto ha podido condicionar, de alguna manera, una mayor participación», reconocía María Gloria del Amo, presidenta de ANPE en Málaga.

En la provincia la tónica fue la misma. Muchos alumnos secundaron la huelga en los institutos de la Costa del Sol, no tanto los profesores, que en la mayoría de los centros no pasaban del 50% de participación. Por ejemplo, en el IES de Benalmádena, de los más de 400 alumnos que reciben su enseñanza allí, sólo unos 50 acudieron a clase. La situación se reprodujo en los centros de la comarca de Antequera. En los colegios, como Infante don Fernando y Romero Robledo, sólo secundó la huelga el 40% de los alumnos y asistió todo el claustro de profesores en ambos casos. Donde más se dejó notar esta jornada de huelga fue también en los institutos.

La participación del personal laboral, sin embargo, fue bastante más discreta: en torno al 15% secundó las movilizaciones, según Yolanda Gamero, secretaria general de Enseñanza de CCOO.

Los sindicatos destacan que la incidencia ayer fue mayor que la registrada hace cinco meses, tanto en profesores como en estudiantes. Entonces, la participación se cifró en un 50% de alumnos de Primaria (los padres apoyan las movilizaciones y por eso no llevan a sus hijos a clase); un 70% en Secundaria, Bachillerato y ciclos formativos; y un 21% del profesorado, datos parecidos a los registrados de media en el resto de España.

En la escuela concertada, sin embargo, reinó la calma, a pesar de que también estaban llamados a combatir la Ley Wert. En colegios como el de Las Esclavas, «apenas si se ha notado», como explicaron algunas fuentes. CCOO, UGT y CSIF informaron de que la participación de los profesores en estos centros privados sostenidos con fondos públicos apenas fue del 15%, según Gamero. No obstante, Pedro Luis Lanzat, vicepresidente de CECE, organización patronal que integra a la mitad de los centros privados de la provincia de Málaga, redujo esta cifra en un 2%. Respecto a los alumnos, la participación de los de Infantil y Primaria fue del 8% y los de Secundaria del 45%, informó.

En la Universidad de Málaga el seguimiento fue desigual, según precisaron fuentes de la institución académica malagueña. El paro fue secundado por el 82% del Personal de Administración y Servicios (PAS), según reflejaron los marcadores del control horario de este sector de la comunidad universitaria. En cuanto a los alumnos y los profesores, los datos son más estimativos, si bien se calcula que el 70% de los estudiantes y el 40% de los docentes respaldaron la huelga. Las cifras difieren según los centros. En los de titulaciones sanitarias y técnicas (Medicina, Ingenierías, Arquitectura?), la actividad fue mayor y tan sólo secundó el paro alrededor de un 20% de alumnos y PDI. Por contra, las facultades más relacionadas con las Humanidades, las jurídico-sociales, registraron un apoyo mayor al paro. Así, en Ciencias de la Educación, Comunicación, Turismo, Económicas y Filosofía y Letras se rozó el 100% de seguimiento.

La jornada se desarrolló sin incidentes destacables a pesar de la presencia de piquetes informativos. Por la mañana, además, un grupo de miembros de Marea Verde recorrió el Centro para animar la manifestación de por la tarde, llegando al Edificio Negro.