El sindicato CCOO ha denunciado el deterioro en la atención sanitaria en las plantas de hospitalización en Carlos Haya a consecuencia de los recortes, que han motivado que se pase de contar con tres auxiliares de enfermería a solo dos.

Según el sindicato, este nuevo recorte se ha generalizado en los últimos días y ha ocasionado que numerosos de estos puestos se amorticen o, lo que es lo mismo, que exista una ausencia de renovación de contratos.

El responsable sindical de CCOO en el complejo sanitario, Juan Antonio Torres, señaló que este cupo de personal es el que más está sufriendo la crisis, pues la mayoría de contratos al 100% han pasado a ser del 75% aunque muchos ni siquiera se están renovando, lo que está ocasionando despidos. «Al aplicarse este tipo de contratos en siete horas, quien trabaja de lunes a viernes tiene un día a la semana libre, con lo que se libra un día más y eso significa un trabajador menos», explica.

Esto ocurre, según explica, a causa del plan de organización, pues hasta ahora muchos trabajadores cubrían esas horas o doblaban bajo la promesa de más días de descanso. «Pero ya les deben tantos días que la gente se coge lo que le corresponde», señala.

Según el sindicalista, las plantas que más están sufriendo la situación son, precisamente, aquellas en las que se necesita que el personal esté al 100%. En concreto, se trata de las de cirugía y la de digestivos, que recoge a enfermos muy delicados y que ensucian mucho por la problemática que tienen, lo que hace aún más necesario el trabajo de los auxiliares de enfermería.

«Estos pacientes necesitan que les hagan gastroscopias, colonoscopias y otras pruebas, por lo que la planta se queda muchas veces con una sola auxiliar que no da a basto», dice CCOO.

«Son enfermos sangrantes, que vomitan, se desmayan y necesitan más cuidados e higiene y se hace lo contrario, dejar al personal bajo mínimos», critica Torres, que asegura que la situación se está volviendo crónica desde que comenzaron estos recortes el pasado mes de febrero.

CCOO ya ha se ha reunido con la jefatura de enfermería, que les ha trasladado que se debe a las circunstancias económicas, por lo que lamentaron no poder revertir la situación. «Les hemos pedido que al menos vuelva a haber tres auxiliares en las plantas más penosas», explicó esperanzado Juan Antonio Torres.

Según el también presidente de la junta de personal del complejo hospitalario, los auxiliares de enfermería se hallan en una situación de estrés y saturación. Esta ha llegado al punto de que el pasado viernes los trabajadores de la planta de digestivos terminaron de asear a los pacientes después de comer, cuando lo normal es que estén limpios antes de que el médico pase planta a media mañana.

«Lo primero es cubrir lo mínimo. ¿Para qué quieres replicar células si luego no tienes para limpiar a un enfermo? En tiempos de crisis lo primero que hay que cumplir es con las necesidades básicas», manifestó Torres, que explica que estos trabajadores se ocupan de la higiene de los pacientes, de su alimentación, de atender a las familias, además de aquellos cuidados relacionados con la estancia en el centro sanitario.

Según fuentes de la dirección del hospital, no existe reordenación alguna en las unidades de hospitalización que esté afectando al número de auxiliares de enfermería, aunque reconocieron que es posible que la ausencia imprevista de un profesional no haya podido ser sustituida, «pero en todo caso es un tema puntual y no obedece a ningún plan organizativo».

Asimismo, destacaron que el número del personal de enfermería, tanto de auxiliares como de enfermeras, es diferente en cada unidad de hospitalización y se establece en función de las cargas de trabajo estudiadas en cada unidad.