El nuevo delegado en Málaga de la Federación Andaluza de Tiro Olímpico, Agapito Sanchidrián, que no lleva ni un mes en el cargo, declaró el pasado viernes a La Opinión que «desde que he llegado estoy recabando información de todas partes» y reuniéndose con los clubes que han presentado la denuncia «para aunar criterios y que lleguemos a un entendimiento por ambas partes para que no haya problemas en el aspecto deportivo».
Para el delegado, en estas denuncias subyace la intención de los clubes deportivos privados de «hacer sus instalaciones rentables a costa de los socios que tiene la federación de Málaga. Su objetivo es cerrar nuestro campo para recabar los socios que tenemos en activo».
En relación con las denuncias sobre irregularidades administrativas y medioambientales resaltó que le consta «que la directiva anterior ha tratado de hacer todo lo necesario para que esté en perfectas condiciones de salubridad» y de todo tipo, y subrayó que si «alguna cosa se ha podido escapar», la delegación de Málaga «ya está trabajando en ese sentido».
Por último, explicó que el campo de tiro Guadalmedina no tiene licencia de apertura porque cuando se concedieron los terrenos, hace 42 años, «no hacía falta».
