Los forenses del caso de la modelo eslovaca María Kukucova, a quien se juzga estos días por el supuesto asesinato de su exnovio Andrew David Bush el 4 de abril en Estepona, han explicado que, tal y como ella aseveró, no hallaron lesiona de defensa ni de ataque en el cuerpo de la víctima, lo que no quiere decir que no hubiera altercado, sino que si lo hubo, el forcejeo no tuvo entidad como para provocar lesiones.

La modelo ha terminado hoy de declarar y, aunque ha reconocido que disparó, lo hizo porque hubo un forcejeo previo y el empresario le pegó antes, aunque no tuvo intención de matarlo ni sabía que lo había hecho cuando huyó de la casa de Estepona en la que se produjo el crimen.

La sesión de hoy ha revestido especial dureza, pues se han mostrado las fotos del cadáver y los forenses han explicado que este recibió tres disparos, el último mortal de necesidad en la cabeza. La modelo eslovaca se ha echado a llorar y no ha podido parar de forma que ha sido trasladada fuera de la sala por la policía para que se calmase.

La modelo rusa que era la pareja del fenecido esa noche asegura que llegaron a la casa y ella vio ropa de la acusada, por lo que se fue al coche y Bush entró, hubo una fuerte discusión por el hecho de que la procesada hubiera ocupado la mansión de Estepona y salió de la casa para tranquilizarla. Luego volvió a entrar y ella escuchó desde el coche tres "ruidos raros" como si algo se cayera, la supuesta asesina salió de la vivienda y le pidió que se bajara del coche, sacó las maletas y huyó.