El pleno del Ayuntamiento de Málaga aprobó ayer, por unanimidad y por segunda vez, realizar una auditoría de ingresos y gastos justificados de los últimos cinco años en la Sociedad Municipal de Aparcamientos y Servicios (Smassa), de los contratos de servicios y también del de descontaminación de Los Asperones, sin perjuicio, además, de que los grupos de la oposición tengan acceso a los expedientes sobre la situación financiera de la empresa.

En virtud de una moción urgente del PSOE también se ha establecido continuar investigando la denuncia realizada por el comité de empresa de Smassa relativa a las amenazas por parte del jefe de Servicios.

También se aprobó ajustarse a la legalidad tras salir a la luz la existencia de dos contratos de alta dirección en Smassa -uno de ellos sería el del jefe de Servicios mencionado- cuando un acuerdo del pleno permite solamente uno.

Actuar conforme a la ley. En este sentido, un informe de lo servicios jurídicos de Smassa dictamina que la solución pasaría por reconvertir el contrato de alta dirección que tiene ese directivo en un contrato laboral, aunque esto solo es posible con el acuerdo de las dos partes.

En cualquier caso el alcalde y la edil de Movilidad, Elvira Maeso, señalaron que el directivo en cuestión «ha trabajado y ha hecho su labor» durante muchos años. En consecuencia, defendió que desde el Consistorio «se actuará como legalmente corresponda».

A juicio de la portavoz socialista, María Gámez, como presidente de Smassa De la Torre «debería ser menos condescendiente» con este asunto. «Han tenido dos años a un alto directivo oculto, cuyas retribuciones aún no están claras», denunciando, al igual que otros grupos, «la falta de transparencia» en Smassa, que se ha convertido en «otro agujero negro». Y es que «cada vez que sacamos un papel sale algo» apostilló.

De la Torre respondió a las críticas en materia de transparencia diciendo que el Ayuntamiento de Málaga ha avanzado, en comparación con la época en la que gobernaba el PSOE, «de aquí a Lima».