Los bomberos volvieron ayer a la carga en el pulso que mantienen con el Ayuntamiento y denunciaron una vez más las deficiencias en materia de seguridad en la capital malagueña. Así, enumeraron un total de 32 irregularidades que, según señalan, comprometen la seguridad de los malagueños, según fuentes del Sindicato Andaluz de Bomberos (SAB) de Málaga. Entre las denuncias del colectivo, figuran la conclusión del parque de Campanillas, cerrado tras la inversión, así como la deficiencia de plazas de profesionales. «El presupuesto municipal contempla 400 plazas en el Servicio de Bomberos, de las que están cubiertas 300. ¿Aún así no hay déficit de personal? ¿Dónde va a parar el dinero de las 100 que no están ocupadas?», se preguntan en el documento.

Otra de sus reivindicaciones es que el material de rescate en altura nunca ha pasado las revisiones de seguridad que marca la ley y su exposición a sustancias cancerígenas ante la falta de descontaminación de los trajes tras intervenir en incendios. Asimismo, denuncian que el número de prácticas y simulacros que realizan es «ridículamente escaso» o que la torre de prácticas del Parque Central está declarada «en ruinas».

Desde el SAB también lamentan que la unidad médica de bomberos se encuentre muchos días inoperativa por falta de personal y lamentan falta de medios para hacer rescates en el agua, como en las últimas inundaciones.

Por último, el sindicato critica que los detectores de gases explosivos no pasan las correspondientes revisiones marcadas por el fabricante. «Como ni la Jefatura ni el concejal entran en pisos inundados de gas butano poco importa».