Alfonso Blanco, propietario de un local comercial que asoma a la rotonda de la calle Alcalde Díaz Zafra, ha pedido al Distrito de Cruz de Humilladero que elimine la rampa de acceso a un grupo de locales comerciales de la calle, construida hace unos 15 años, porque ocupa los nueve metros de su fachada. En su lugar pide otra solución.

Los locales, algo común en esta zona del Camino de San Rafael, se encuentran a más altura que la acera, pero Alfonso Blanco considera que hay otras soluciones técnicas para acceder a ellos.

«A dos pasos hay otro tipo de rampas», comenta, y pone de ejemplo un par de rampas, la segunda de ellas en zigzag en la calle Periana.

A su juicio, se puede poner una escalera o bien una rampa de este último tipo, con lo que la altura de la acera de los locales no variaría, como ahora. «Es que ahora mismo se verían las piernas de los clientes», explica, y comenta que tiene el local preparado para que acoja una cafetería, pero en estas condiciones no puede explotarlo, «tampoco tiene venta ni puedo alquilarlo porque es que los nueve metros de rampa están pegados a mi fachada», lamenta.

Alfonso Blanco comenta que ninguno de los locales comerciales a los que da acceso esta rampa se han podido explotar.

«No es culpa del Ayuntamiento porque están en alto, pero creo que tiene que poner las condiciones necesarias», y apunta a que, además, en la zona baja de la acera, en la parte más estrecha, hay concentrados un anuncio, una farola, el semáforo y muy cerca un contenedor que en realidad sirve a los bloques situados bastantes metros atrás, en la calle Faraján, una acumulación de obstáculos que dificulta el paso de los peatones.

El propietario del local cuenta que ha hablado dos veces con la concejala Teresa Porras, «pero no le ha visto posibilidad de hacer nada, aunque me ha comentado que le preparara un proyecto y lo estudiaría; un proyecto vale mucho dinero, eso lo podrían hacer los técnicos del Ayuntamiento».