La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Andalucía y la federación de servicios públicos de UGT-A han rechazado que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) deje de exigir la exclusividad a sus cargos intermedios.
Ambos sindicatos mostraron ayer su disconformidad con la medida contemplada por SAS en la propuesta de decreto de provisión de puestos directivos y de cargos intermedios, que se analizó ayer en la mesa sectorial, y que suprime la obligatoriedad de la exclusividad para quienes ejerzan como cargos intermedios.
CCOO sostiene que esa medida redundará negativamente en la actividad asistencial de los centros, puesto que, en un contexto como el actual, con una sobrecarga asistencial relevante y significativas limitaciones presupuestarias y de plantilla, es esencial que los cargos intermedios estén dedicados en exclusividad a la coordinación de sus servicios o unidades. Mientras que UGT acusó al SAS de seguir con la «política del dedo» para colocar «amiguitos».
