El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este jueves la Orden ministerial de Hacienda por la que se reducen los Índices de Rendimiento Neto aplicables en 2019 en el sistema de estimación objetiva del IRPF (o de módulos), que beneficia a agricultores y ganaderos afectadas por diversas circunstancias excepcionales.

Esta orden recoge la propuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) de minoración de dichos índices. Para aplicar la rebaja, se han tenido en cuenta daños climáticos y otro tipo de adversidades, como losderivados de problemas de mercado.

En Andalucía el efecto de las reducciones establecidas a escala nacional es alto, por tratarse de producciones importantes dentro de su ámbito territorial, con rebajas que benefician a olivareros, así como a productores de cereales, cítricos, leguminosas y oleaginosas, así como a los productores de ganadería extensiva, vacuno de leche y apicultura.

En Málaga, además, todos los olivareros de Alhaurín el Grande, Almogía, Campillos, Sierra de Yeguas, Arenas, Canillas de Aceituno, Ojén y VélezMálaga se beneficiarán de una mayor reducción de módulos que la fijada a escala nacional, al quedar en el 0,09 en esos términos municipales.

Asimismo, destaca la rebaja en los módulos, además del olivar antes mencionado, para las producciones de castaña, cítricos, frutas tropicales (aguacate y mango), uva de mesa y para vino, almendra y productos hortícolas en varios términos municipales.

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) calcula que la aplicación de esta norma en el conjunto del sector agrario supone una rebaja de la base imponible del orden de 614 millones de euros para el sector agrario, la mayor cifra del último quinquenio y prácticamente el triple del año anterior.

En la comunidad de Andalucía, el conjunto de todas las reducciones puede suponer una minoración de la base imponible de unos 270 millones de euros, lo que significa el 44 % del total nacional.

También se aplican a la campaña de módulos 2019 reducciones para los agricultores que utilicen electricidad para el riego, en aplicación de un coeficiente corrector que se introdujo en 2014 y que podrán seguir aplicando los

agricultores que utilicen electricidad para el riego sobre el rendimiento neto de los cultivos regados, y que supondrá una reducción de un 20 % del mismo.

También se mantiene la reducción del 5 % del rendimiento neto calculado por el método de estimación objetiva para 2019. Se trata de una medida de carácter horizontal que afecta a la totalidad de los agricultores y ganaderos que tributen en estimación objetiva.