Los locales de ocio nocturno, discotecas y bares musicales, critican la intención de la Junta de Andalucía de restringir la actividad de estos establecimientos con un abanico de medidas que se decidirá el lunes, pero que podrían conllevar, entre otras, el cierre de los negocios hasta que no amaine la crisis del Covid-19 y los continuos rebrotes que se están dando en todo el país. El contagio masivo que se ha dado en una fiesta de estudiantes celebrada en Córdoba, en el que parte de la noche fue consumida en una discoteca de Córdoba, ha puesto a las discotecas en el punto de mira de las autoridades sanitarias. Sin embargo, un colectivo surgido en la capital a raíz de la crisis del coronavirus, autodenominado Málaga Noche, rechaza la intención de la Administración autonómica de cerrar estos locales y pide que no se les «demonice», ya que son empresas que se han ocupado, precisamente, de adoptar fuertes medidas de seguridad y de control de aforo.

Pedro Marín, portavoz del colectivo y el empresario más veterano del ocio nocturno local, asegura que las discotecas malagueñas están facturando el 30% o el 40%, según el negocio, en relación a lo facturado el año pasado, es decir, la caída es de entre un 60% y un 70%. En algunos casos como el del propio Marín, cuyo local abrió el fin de semana pasado por primera vez, la caída de la facturación fue del 88% en relación al mismo periodo del año pasado. En la capital hay asociados a esta plataforma 17 empresarios que poseen una treintena de locales (la mayoría) y dan trabajo a más de 600 personas de forma directa, más los puestos indirectos. Si se cierran ahora estos establecimientos, muchos no volverán a abrir con la pérdida de los correspondientes trabajos (hay otros empresarios no asociados o en otros colectivos y los números son superiores).

«Queremos quitarnos el estigma de que las discotecas son las causantes de los brotes. El Gobierno andaluz está recibiendo mucha presión de Sanidad a nivel nacional, porque vamos a ser cabezas de turco. Ya estamos con un aforo al 40%, el 75% para los bares musicales, y hemos contratado personal extra de limpieza, además tenemos gente para controlar que los clientes se pongan la mascarilla cuando van al baño, no permitimos el baile y encima hemos de sufrir los rumores de que en las discotecas es donde más se dan los contagios», dice Marín. Se refiere a que en el caso del rebrote de Córdoba, los estudiantes llegaron a la discoteca, según explica, pasadas las cinco de la mañana y antes estuvieron en varios sitios, por lo que el contagio pudo darse en cualquier otra parte. «Lo fácil es cerrarnos a nosotros. Además, se dan también infecciones en fiestas privadas o en botellones, pero se insiste en culpar a las discotecas. Si hay un foco en un entro comercial, no se cierran todos los centros comerciales, ¿no?», dice y recuerda que hay reuniones de personas en bares y restaurantes, por ejemplo. «Nosotros somos especialistas en controlar el aforo de los locales», recalca, para añadir que muchas discotecas y bares musicales malagueños, además de negocios de naturaleza similar, se están uniendo a Málaga Noche precisamente por el miedo a tener que cerrar y a perder los puestos de trabajo. Sólo el 2% de los actuales rebrotes a nivel nacional están relacionados con discotecas.

El Gobierno andaluz decidirá el lunes

De cualquier forma, el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, explicó el pasado martes que será el próximo lunes cuando el Gobierno andaluz aborde la situación de estos locales y que la actuación autonómica se regirá por criterios sanitarios. Aludió al brote de Córdoba. En relación a este, se han hecho 2.990 pruebas PCR, de las 91 han sido positivas. El rastreo, indicó, funciona. Esperan, por ahora, un informe de la Consejería de Salud y Familias. Marín, no obstante, advirtió de que «parece que en espacios cerrados, especialmente en locales de ocio donde se eleva el tono de voz, la probabilidad de un contagio se incrementa en un 19-20%, y eso ya con la medida aplicada de un aforo limitada al 40%». Con todo, aseguró que las medidas del Gobierno andaluz se evalúan cada dos semanas.