El consejero de Economía, Rogelio Velasco, mantuvo ayer una reunión con los primeros grupos de investigación beneficiarios de la línea de ayuda, dotada con 3 millones, destinadas a incentivar la investigación científica sobre el coronavirus SARS-COV-2 y la enfermedad de la COVID-19.

Hasta la fecha se han recibido 261 solicitudes, de las que la Dirección de Evaluación y Acreditación (DEVA) de la Agencia Andaluza del Conocimiento ha evaluado 84, aprobando un total de 27, que percibirán 1,6 millones de euros para financiar proyectos de I+D de rápida aplicación y de un año de duración.

Los incentivos, financiados con fondos Feder, están incluidos en el decreto-ley aprobado por la Junta en marzo en el que se recogen medidas extraordinarias y urgentes en los ámbitos económico y social.

Velasco aseguró que con está «inyección pública incentivamos la investigación científica sobre el virus para lograr un diagnóstico temprano y unos tratamientos más eficaces, que ayuden a minimizar los efectos de la pandemia».

Además de estos proyectos, universidades andaluzas, centros de investigación y empresas innovadoras han reorientado ensayos e investigaciones para adaptarlos a las necesidades que el virus ha impuesto, explicó el consejero en un comunicado.

«Ahora más que nunca precisamos que el conocimiento y la investigación se pongan al servicio de la salud», incidió.

Once de las 27 propuestas que han logrado financiación han contado con colaboración privada, de forma asociada a la entidad pública de I+D, con la finalidad de buscar una inserción rápida en el mercado de los resultados obtenidos.

Velasco subrayó el éxito de la Universidad de Granada, que ha presentado 14 de los 27 proyectos financiados hasta el momento.

Le siguen la Fundación para la Investigación Biosanitaria de Andalucía Oriental Alejandro Otero (FIBAO), con tres proyectos; y la Fundación Pública Andaluza para la Gestión de la Investigación en Salud de Sevilla y la Universidad de Málaga con dos iniciativas cada una.

El resto de propuestas aprobadas han sido presentadas por la Universidad de Jaén; la Universidad de Almería; el Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa (Cabimer)-CSIC; la Fundación Pública Andaluza Progreso y Salud; el Instituto de parasitología y Biomedicina López Neyra; y el Instituto de Investigaciones Químicas-CSIC. Es urgente lograr desentrañar la composición del virus y cómo actúa, conocer bien, o más detalladamente los mecanismos de transmisión, el mal que causa una vez que entra en el organismo y se desarrolla o las secuelas que deja, extremo en relación al cual cada día se descubren nuevos aspectos. Asimismo, otros frentes importantes de biólogos y médicos son dar con tratamientos más avanzados y eficaces que permitan superar la enfermedad causada por el virus de la mejor forma posible y, desde luego, hallar la vacuna, cuya averiguación se ha convertido en una carrera.