Tras las concentraciones en los centros de salud del pasado 13 de octubre, CSIF, junto a CCOO y UGT, se volvieron a movilizar ayer, esta vez frente al Hospital Regional, para reclamar más personal y recursos para la sanidad pública en Málaga. La protesta forma parta del calendario conjunto acordado por las organizaciones sindicales para denunciar la actual situación de colapso en los centros y de sobrecarga de los profesionales sanitarios en nuestra comunidad autónoma.

Con esta concentración, que se llevó a cabo en hospitales de todas las provincias andaluzas, se denuncia que la crisis sanitaria está poniendo «a un maltrecho sistema sanitario público de nuevo al límite de su capacidad y que las administraciones, tanto autonómica como central, no están llevando a cabo una buena gestión ni están a la altura de las circunstancias», indicó CSIF en un comunicado.

«El sistema sanitario va a colapsar si seguimos sin cuidar la Atención Primaria, que es el dique de contención de esta pandemia», advirtió el responsable de CSIF Sanidad Málaga, Juan Pedro Ruiz.

«No se trata de un problema de colapso puntual en un centro sanitario concreto, sino que es una situación que se extiende por toda la provincia, afecta a todo el sistema público de salud, y la saturación se agrava», denunció el responsable sindical, que insistió en «el esfuerzo y la labor» de los profesionales.

Para CSIF, es necesaria una inversión mayor, de al menos el 7,2% del PIB, así como más medios materiales y humanos para una respuesta sanitaria adecuada en tiempo y forma y de calidad, con una gestión más eficiente de los recursos, recuperando el diálogo y la negociación con los trabajadores, pues son quienes sostienen el sistema con su profesionalidad y dedicación.

Las principales reivindicaciones de las organizaciones convocantes pasan por recuperar el diálogo social que facilite acuerdos que mejoren las condiciones de los trabajadores del SAS, una reforma de la Atención Primaria que recupere su esencia original, de protagonismo en lo asistencial y en la gestión a sus trabajadores y se sustente en una financiación adecuada.

Además, instan a la Junta de Andalucía para que «actúe enérgicamente» ante el Ministerio para que «retire el Real Decreto Ley 29/2020, donde de forma unilateral se impone la movilidad geográfica y funcional a todo el personal sanitario», así como «para que el Gobierno central desmienta la posible congelación salarial para el personal de sanidad».

Igualmente, se cree imprescindible avanzar en la mejora en la Prevención de Riesgos Laborales, en garantizar la continuidad laboral, la cobertura de bajas, el incremento de las ratios de profesionales por pacientes que disminuyan la carga asistencial y administrativa, así como hacer ofertas atractivas para el personal residente, y el reforzamiento del diálogo social en Andalucía que permita llegar a grandes acuerdos que mejoren el sistema sanitario público.

Está previsto que las protestas continúen el próximo día 29 de octubre con una concentración ante la sede central del SAS en Sevilla.