El vicerrector de Estudios de la Universidad de Málaga (UMA), Ernesto Pimentel, ha incidido este lunes, ante la supresión de las clases presenciales en la Universidad impuesta por el Gobierno andaluz para reducir los contagios de COVID-19, que "entendemos que la situación es la que es y entendemos que las circunstancias parecen que están obligando a estas medidas".

"Desde la UMA, como siempre, insistimos en la importancia de la presencialidad, pero asumimos también que lo primero y lo fundamental es intentar preservar las condiciones para que todo se haga en las mejores condiciones posibles y preservando la seguridad de todos", ha afirmado.

Por tanto, Pimentel, en declaraciones a Europa Press, ha explicado que, "como no puede ser de otra forma", la Universidad de Málaga asume la orden y el decreto publicado. "Dentro de lo que es la organización que ya está establecida, la docencia que se pueda se pasará online y mantendremos, eso sí, en presencial aquellas actividades que tiene difícil sustitución, que tiene que ver con las prácticas y el carácter más experimental y más práctico, que es difícil de sustituir".

Ha valorado, asimismo, la organización implantada en la institución académica malagueña con motivo del COVID, con "espacios seguros y combinaba esa actividad presencial y no presencial de una forma que entendemos que es segura", aunque ha añadido que "también entendemos que las circunstancias, los números y el colapso en los centros sanitarios se quieren evitar", por lo que "asumimos el decreto, como no puede ser de otra forma".

Sobre el número de alumnos que estarán afectados por esta medida, Pimentel ha incidido en que todos se verán afectados pero "la cuestión es el número de actividades que se verán afectadas, que serán bastantes".

Adaptar las actividades

Por otro lado, la Universidad de Málaga, mediante una resolución del rector emitida previa reunión con el Consejo de Decanos y Decanas y Directores y Directoras de Centro, ha detallado un conjunto de medidas para adaptar sus actividades a lo dispuesto este pasado domingo en el decreto publicado por la Junta para restringir la propagación del coronavirus.

Así, siguiendo las instrucciones y recomendaciones de las autoridades sanitarias, administrativas y académicas competentes, la UMA garantiza el cumplimiento de las obligaciones laborales de profesores y trabajadores, así como las obligaciones de estudio del alumnado.

En cuanto a la docencia, desde este martes, 10 de noviembre y hasta el día 23, pasará a la modalidad no presencial, incluidas todas las actividades formativas y las tutorías que son competencia del profesorado universitario.

Quedará exceptuada del régimen de no presencialidad la realización de prácticas experimentales, rotatorias, prácticum o actividades similares, que se realizarán de forma presencial, adoptando las medidas recomendadas por las autoridades sanitarias y de acuerdo con el plan de contingencias para la prevención de la enfermedad aprobadas por la Universidad, en las que se respetarán las medidas de distanciamiento, ventilación y protección necesarias para evitar el contagio de las personas.

El mismo tratamiento recibirán las pruebas de evaluación de dichas prácticas. El resto de las evaluaciones de estudiantes previstas oficialmente durante este período se llevarán a cabo de manera no presencial. Los decanos y directores de centro serán los encargados de determinar qué actividades se consideran experimentales, rotatorias, prácticum o similares, han informado desde la UMA en un comunicado.

En este punto, han destacado que el paso a enseñanza no presencial ya se establecía en el marco aprobado en Consejo de Gobierno el pasado 29 de junio para la adecuación de la organización de las enseñanzas universitarias a las exigencias sanitarias motivadas por la COVID-19.

En el mismo, se establecía un modelo de enseñanza bimodal que combinaba la docencia presencial con la virtual y que preveía volver a la formación a distancia en el caso de situación de necesidad con riesgo para la salud de las personas.

Por otro lado, el personal docente e investigador de la Universidad de Málaga desarrollará su labor en los términos y condiciones establecidas en la resolución rectoral, de forma presencial o mediante teletrabajo, en aplicación de las decisiones adoptadas por los órganos de dirección y gobierno de la UMA y de la planificación docente e investigadora.

Por su parte, el personal de administración y servicios continuará desarrollando su actividad de apoyo a la actividad docente e investigadora, así como la actividad administrativa, técnica y de gestión, en los términos y condiciones que determina la resolución, de forma presencial o mediante teletrabajo, en aplicación de las normas establecidas por la Junta de Andalucía y de la planificación de los propios servicios universitarios.

Acceso a las instalaciones universitarias

Asimismo, han señalado que las instalaciones universitarias permanecerán abiertas para el desarrollo de las actividades ordinarias de esta institución académica hasta las 21.00 horas, en los términos y condiciones establecidas por los órganos de gobierno y administración de la Universidad, así como las normas y protocolos de prevención y seguridad en materia de salud.

En cuanto a las bibliotecas universitarias, seguirán abiertas para la realización de las actividades de estudio y préstamo, en los términos en los que se venían desarrollando en la actualidad. Las secretarías de los centros también estarán abiertas para la atención de los usuarios, en los términos previstos mediante cita previa.

Por otro lado, el Servicio de Deportes mantendrá abiertas las instalaciones al aire libre para la práctica de las actividades deportivas programadas, cumpliendo las normas de prevención y seguridad establecidas. Sin embargo, permanecerán cerradas al público el resto de las instalaciones.

Por último, las salas de exposiciones permanecerán abiertas al público con las limitaciones establecidas en las normas y planes de prevención aprobados por la Universidad, en cuanto a aforo y seguridad en materia de salud.