Educación

Emprendimiento escolar desde Málaga con los Reyes de testigos

Alumnos de Maristas y El Pinar presentan este lunes en Barcelona el proyecto que ganó el Reto del Tour del Talento de la Fundación Princesa de Girona, que será realidad de la mano del Ayuntamiento y la Diputación de Málaga

Alumnos de Maristas explican a los Reyes su proyecto en el Tour del Talento en Málaga. | L.O.

Alumnos de Maristas explican a los Reyes su proyecto en el Tour del Talento en Málaga. | L.O. / susana fernández. málaga

Emprender no es sólo generar ideas de negocios. En Maristas el emprendimiento se entiende como la capacidad de detectar problemas y encontrar soluciones creativas. Esto es lo que aprenden los alumnos a través de numerosos proyectos y participando en concursos e iniciativas que les llevan a situaciones lo más reales posibles. Este lunes muestran en la Fundación Princesa de Girona su idea y la del Colegio El Pinar para mejorar la orientación profesional en Málaga.

El término emprender lleva años formando parte del universo laboral y fue tal vez durante la crisis de 2008 cuando se implantó definitivamente e incluso puede que se abusara del mismo. Sin embargo, en el ámbito educativo tiene una importancia incuestionable en cuanto hace que los estudiantes sean los protagonistas de su propio aprendizaje. Así lo creen en el Colegio Nuestra Señora de la Victoria-Maristas Málaga, donde el emprendimiento es una metodología de trabajo que les está dando muy buenos y visibles resultados.

«No es sólo buscar ideas de negocio o generar negocio», explica Jesús Martín Béjar, profesor de Economía y Cultura Emprendedora del colegio Maristas. «Entendemos el emprendimiento como la capacidad de detectar problemas y buscar soluciones creativas», detalla.

Entendemos el emprendimiento como la capacidad de detectar problemas y buscar soluciones creativas

Con este punto de partida, son muchos los proyectos que han realizado este curso pero el que tiene más proyección es sin duda el que ha surgido de su participación en el Tour del Talento organizado en Málaga el pasado marzo por la Fundación Princesa de Girona y Trivu, y con la asistencia de los Reyes de España.

De los 140 participantes de toda Málaga, un grupo de cinco alumnos de Maristas, junto a otros cinco estudiantes del Colegio El Pinar, fueron los ganadores del Reto del Talento planteado por la Fundación Princesa de Girona. El objetivo era realizar propuestas sobre cómo mejorar la orientación profesional en Málaga y los proyectos de ambos centros educativos convencieron al jurado y ahora se harán realidad de forma conjunta.

Con el respaldo del Ayuntamiento y la Diputación de Málaga, están trabajando en una plataforma virtual de orientación laboral para jóvenes donde puedan adquirir ‘soft skills’ o ‘habilidades blandas’ a través de prácticas en empresas de ámbito social o proyectos de voluntariado.

La plataforma se alojará en las web institucionales del Ayuntamiento y de la Diputación, además de en los centros educativos que lo deseen, y se difundirá con el apoyo de las redes sociales.

Por otro lado, este portal recogerá fichas de jóvenes malagueños que quieran tener una experiencia de inmersión laboral en empresas.

Todos los detalles de este proyecto, que verá la luz en el último trimestre del año, se los contarán hoy estos estudiantes malagueños a los Reyes de España en un acto en Barcelona. Será en el preámbulo de la ceremonia de entrega de premios de la Fundación Princesa de Girona 2022.

Los dos equipos de alumnos, el de Maristas con el profesor Jesús Martín Béjar, y el de El Pinar liderado por el docente Mateo García López, explicarán a don Felipe y doña Letizia este proyecto, ejemplo de emprendimiento desde la educación para cubrir una necesidad social.

En Maristas, el emprendimiento se concibe como un complemento fundamental que se suma a los contenidos curriculares a través de iniciativas como ésta, en la que han participado alumnos de todas las modalidades de Bachillerato. «Trabajamos el desarrollo de la creatividad en nuestro alumnado. Queremos que todos tengan ese pensamiento crítico: localizo necesidades y busco soluciones», indica Jesús Martín Béjar.

El docente aclara que tanto en 4º de la ESO, en las asignaturas de Economía y en Tecnología, como en Cultura Emprendedora y empresarial, en 1º del Bachillerato de Sociales, se trabaja la competencia emprendedora de una forma muy práctica. Por ejemplo, los estudiantes de Economía participan siempre en el taller del Área de Educación del Ayuntamiento de Málaga: ‘Mi idea de empresa’, «en el que reciben formación y buscan ideas de negocio que responden a necesidades de la ciudad».

Este equipo de Maristas ha ganado el Desafío Junior de ESIC de este año. | NOMBRE FEQWIEOTÓGRAFO

Este equipo de Maristas ha ganado el Desafío Junior de ESIC de este año. / L. O.

Colaboración con ESIC

Además, también destaca la colaboración con la Escuela de Negocios ESIC que les permite recibir formación de expertos y ver la aplicación en la vida real. Así, este curso han participado en el concurso de ESIC Desafío Junior Empresarial, en el que los alumnos deben proponer ideas de negocio viables. Y el ganador fue un equipo de Maristas -íntegramente femenino, por cierto- que propuso un proyecto relacionado con la sostenibilidad para reducir el consumo de plástico con bolígrafos recargables.

Igualmente, la formación de ESIC ha permitido a estos alumnos ayudar a empresas como el chiringuito Tropicana o entidades como la Casa Ronald McDonald de Málaga a mejorar su estrategia digital. Tras aprender sobre SEO o el uso de redes sociales a nivel empresarial, los estudiantes prueban así sus conocimientos en casos reales.

Es intentar que las cosas que hacemos en clase, los proyectos y las prácticas, sean reales, que aporten algo directamente a la sociedad o que lleguen a ser lo más parecido posible

El profesor Martín Béjar destaca que se trata de un «aprendizaje basado en la experiencia real. «Es intentar que las cosas que hacemos en clase, los proyectos y las prácticas, sean reales, que aporten algo directamente a la sociedad o que lleguen a ser lo más parecido posible». Por eso, en estas actividades y concursos participan alumnos de todas las modalidades de ESO y Bachillerato y no sólo de las relacionadas con la empresa.

Trabajar de esta forma no siempre es fácil puesto que a veces implica desde a alumnos de Infantil a Bachillerato. Es el caso de un proyecto realizado este año en Tecnología Industrial. Los profesores lanzaron a los estudiantes el reto de cómo ayudar a los más pequeños a aprender a leer y formar palabras y el resultado han sido unas letras diseñadas con impresoras 3D.

«Es un cambio de mentalidad. El emprendimiento es una forma de trabajar», resume el profesor del Colegio Maristas.

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