Sanidad

Investigadores malagueños descubren cómo tratar un tipo de epilepsia farmacorresistente

El estudio realizado por investigadores de IBIMA y del Hospital Regional revela que la combinación de unos fármacos permitiría reducir el número de crisis en un tipo de epilepsia

Para la realización del estudio se reclutaron ocho pacientes de distintos hospitales de Málaga, Barcelona y Sevilla

Pedro Serrano junto a un grupo de investigadores

Pedro Serrano junto a un grupo de investigadores / La Opinión

Arancha Tejero

Arancha Tejero

Cada año se detectan en España entre 12.400 y 22.000 nuevos casos de epilepsia, una enfermedad neurológica crónica caracterizada por la presencia de crisis recurrentes de convulsiones. Unos episodios de actividad descontrolada y anormal de las neuronas, que pueden causar incluso cambios en la atención o el comportamiento. Se trata por tanto de una enfermedad que tiene un impacto significativo en la calidad de vida de las personas que la padecen, especialmente para aquellos 100.000 pacientes con epilepsia farmacorresistente a los que no les surten efectos los tratamientos convencionales. 

Una dura realidad que podría remediarse gracias al nuevo estudio de un grupo de investigadores malagueños de IBIMA Plataforma BIONAND y el Hospital Regional, que revela, a través de la combinación de fármacos, la posibilidad de reducir el número de crisis en un tipo de epilepsia de origen neuroinflamatorio, resistente a los tratamientos tradicionales. 

“La epilepsia asociada a los anticuerpos Anti-GAD65 conforma una enfermedad considerada rara, de consecuencias catastróficas, cuya expresión clínica consiste en epilepsia con crisis parciales con deterioro de conciencia y/o crisis generalizadas que se muestra refractarias a los tratamientos médicos”, explica Pedro Serrano, jefe de servicio de Neurología del Hospital Regional de Málaga y coordinador de la Red Andaluza de Investigación Clínica y Traslacional en Neurología, vicedirector científico de IBIMA e investigador responsable del estudio liderado por el grupo ‘Neuroinmunología y Neuroinflamación’.

Ausencia de fármacos

Según las explicaciones Serrano, este tipo de patología produce frecuentemente deterioro cognitivo y afectación de trastornos neuropsiquiátricos asociados, como la ansiedad, depresión, o incluso brotes psicóticos.  “Hablamos de un síndrome para el que, de manera reiterada, se han mostrado ausencia de estrategias farmacológicas capaces de revertir sus síntomas, ya que ni los fármacos tradicionales ni los modernos anticrisis lo han conseguido”, señala el investigador, que destaca que, hasta ahora, “ni la cirugía de la epilepsia ni los fármacos inmunomoduladores han aportado una estrategia adecuada para estos pacientes”.

No obstante, este grupo de investigadores malagueño ha logrado dar un paso adelante en la búsqueda de un posible nuevo tratamiento para estos pacientes farmacorresistentes. El equipo liderado por Serrano ha demostrado la eficacia en uno de los subtipos de epilepsia farmacorresistente, gracias a la combinación de dos medicamentos: Cenobamato, un nuevo fármaco anticrisis, y Clobazam, en el tratamiento de un raro tipo de epilepsia de base neuroinflamatoria, relacionada con la creación de anticuerpos frente a la decarboxilasa del ácido glutámico (GAD), una enzima directamente relacionada con el metabolismo del GABA, principal neurotransmisor inhibitorio del cerebro humano, implicada también en otras enfermedades neurodegenerativas.

Estudio de 8 pacientes

La eficacia de la combinación de estos dos fármacos quedó demostrada en un estudio para el que se reclutaron a ocho pacientes procedentes de los hospitales universitarios Regional de Málaga y Virgen de la Victoria, el Hospital Clinic de Barcelona, el Vithas Málaga y el Centro de Neurología Avanzada de Sevilla. Según informan desde IBIMA, durante este estudio se pudo analizar que dicha combinación tenía una actuación directa sobre los mecanismos patogénicos de esta enfermedad. 

Los resultados del estudio demostraron que el uso combinado de Cenobamato y Clobazam logró una reducción de casi el 95% de la mediana de crisis, incluso contando con dos pacientes libres de crisis durante tres meses de seguimiento. Además, en dos de los pacientes, y gracias a un estudio neuropsicológico posterior, se pudo certificar una cierta mejora en parámetros como la memoria episódica.

Medicina personalizada

En este sentido, el doctor Serrano ha querido destacar que este descubrimiento es un logro de la Medicina personalizada, ya que “esta combinación de fármacos actúa de manera específica en el mecanismo básico de epileptogénesis en esta enfermedad, es decir, en un fenómeno por el cual una red neuronal normal se transforma en hiperexcitable, siendo capaz de generar crisis de forma espontánea”