La Copa del Rey vuelve a escena para el Málaga CF y lo hace en un día especial, el de la llegada de los Reyes Magos y después de empezar el año con mal pie tras una dolorosa e inesperada derrota liguera ante el Almería. Llega el Levante a La Rosaleda para la disputa del partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey, una competición completamente diferente al de la regularidad y que cada año siembra de ilusión los corazones malaguistas.

Aunque no es menos cierto que la Copa del Rey siempre ha sido un torneo históricamente esquivo para el conjunto blanquiazul, donde su mejor resultado ha sido unos cuartos de final hace dos temporadas, donde fue eliminado con un FC Barcelona que sudó sangre para apear a los blanquiazules.

Pero de vuelta al presente y a lo que nos atañe hoy, el equipo de Javi Gracia, aunque no lo proclame a los cuatro vientos, están muy ilusionados con la Copa. Una vez superado el primer escalón de manera notable contra el Deportivo, el Málaga ve que esta vez sí puede hacer algo bonito en el torneo del KO, con un cuadro relativamente asequible al evitar a los «grandes» -Real Madrid, Atlético y FC Barcelona-, que se pelearán entre ellos por el otro lado del cuadro.

Así las cosas, el de hoy es un partido especial. No sólo porque el cuadro malaguista quiere brillar en la Copa, sino porque quiere recuperar sensaciones después del traspiés del sábado ante el Almería, donde el Málaga disputó su peor partido del curso como local.

La baja de Ignacio Camacho se hizo notar y hoy volverá a serlo por una pubalgia que, de momento, lo tiene apartado de los terrenos de juego de forma indefinida. Y es que, las bajas en defensa se amontonan para el Málaga por lo que pocas rotaciones podrá hacer Gracia en la retaguardia. Sergio Sánchez, Weligton y Flavio siguen en el dique seco, mientras que Boka está ausente por motivos burocráticos. En cambio, la amplitud de recursos en la zona de tres cuartos motiva las rotaciones en un mes de enero que se antoja complicado. Es el turno de los Duda, Juanpi, Horta o Luis Alberto, aunque en la punta de ataque, la no convocatoria de Rescaldani supone una petición pública de Gracia para que Husillos le traiga un delantero por Reyes.

Rival. Por su parte, el Levante aterriza en La Rosaleda con el torneo copero en segundo plano. Su andadura en Liga es muy irregular y los de Alcaraz tienen todos sus esfuerzos puestos en mantener la categoría. Por ello, Lucas Alcaraz prepara numerosos cambios en su once respecto al equipo que perdió el sábado en el Calderón. Su «guerra» no es la Copa, ya tienen bastante con luchar por la permanencia e incluso puede llegar a estorbar. Superó con muchas dificultades la ronda de dieciseisavos ante el Albacete, colista se Segunda, y sufre la baja del senegalés Diop, en la Copa África.