El futuro del Málaga CF podría volver a dar un nuevo giro a partir del próximo 16 de febrero. Y es que ese día está previsto que comience el juicio entre el jeque Al-Thani y la hotelera BlueBay para dirimir la propiedad del 49 por ciento de las acciones del dirigente blanquiazul.

El pasado mes de febrero de 2015, la empresa hotelera y expatrocinador del club presentó una demanda contra el jeque Abdullah Al-Thani y su exsegundo, Abdullah Ghubn, por supuesta apropiación indebida en el accionariado del Málaga CF. En concreto, la hotelera, en nombre de su propietario Jamal Iglesias, exige que los propietarios del club reconozcan que el 49% del accionariado del Málaga es de su propiedad.

BlueBay asegura que en marzo de 2013 pasó a formar parte del accionariado del Málaga tras adquirir el 49% de las acciones del club a través de la sociedad «Nas Spain 2000 S.L.» en la que Al-Thani contaba con el 51% de las acciones. Así las cosas, la hotelera pasó a ser el gestor de la entidad malaguista tanto en la parcela administrativa como en la deportiva.

Además, la hotelera también denunció que Al-Thani constituyó en junio de 2014 una sociedad unipersonal denominada «Nas Football S.L.» como única propietaria del club para «eludir el pago de los 30 millones comprometidos y defraudar a BlueBay».

Por su parte, el Málaga CF niega cualquier acuerdo y tras admitir admitir a trámite y celebrarse el pasado 8 de mayo la vista oral entre ambas partes, será el próximo 16 de febrero cuando se vuelvan a ver las caras en los juzgados, según apuntó ayer la Cadena Ser.

El juez podría exigir la presencia del jeque Al-Thani, de Moayad Shatat o incluso de Vicente Casado, que era el director general cuando sucedieron los acontecimientos. Si la justicia da la razón a BlueBay, el club podría tomar un nuevo cambio de rumbo. Aún así, no se descarta a que se llegue a un acuerdo entre ambas partes antes de que se celebre el juicio.

Al-Thani aparta a Nasser. Al-Thani también fue ayer noticia porque el dirigente le habría quitado los poderes a su hijo mayor, Nasser Al-Thani, y también vicepresidente del club. Según apuntó ayer Radio Marca Málaga, el dirigente habría tomado esta medida por el malestar generado tras el apoyo mostrado por Nasser a la antigua directiva. Sobre todo, por su apoyo en el desayuno informativo respaldando la labor económica de Vicente Casado y Manuel Novo.

Al-Thani, a través de Pedro González Segura, le habría retirado los poderes ejecutivos a su hijo, aunque mantendría el cargo por el momento. Las fuentes del club consultadas por este periódico no han podido confirmar este extremo. Y es que Nasser Al-Thani tampoco ha terminado de ser un ejecutivo involucrado en el trabajo del día a día del club blanquiazul.