La derrota del Málaga CF ante el Reus dejó dos figuras señaladas en la plantilla blanquiazul, las de Juanpi Añor y Dani Pacheco, sustituidos por Juan Ramón López Muñiz al descanso después de una nefasta primera mitad por parte de ambos. Es cierto que ningún jugador, salvo Cifu, eran merecedores de permanecer en el campo tras los primeros 45 minutos ante el Reus, pero el técnico asturiano se decantó por el venezolano, que no dio pie con bola y fue diana de las iras de la afición; y por el de Pizarra, que tuvo muy poco protagonismo y sigue por debajo del nivel que se esperaba de él.

Fueron sustituidos por Renato Santos y el canterano Hugo, que debutaba en el primer equipo. El portugués no mejoró la pésima actuación de Juanpi ni Pacheco, aunque el juvenil de Granada sí dejó detalles de su calidad y desparpajo en los primeros minutos de la segunda mitad.

En todo caso, la situación de Juanpi Añor con la afición del Málaga vuelve a enconarse. Los pitos que el internacional venezolano recibía en temporadas pasadas volvieron a la luz el domingo. Juanpi lo intentó, pero no tuvo su día y muchas de sus acciones desesperaron al respetable, que la tomó con él. Quizás por ello y mezclado también con su falta de acierto fueron las claves para que Muñiz lo dejara en el banco en la segunda parte. Pacheco, por su parte, no fue pitado pero apenas tuvo contacto con el balón y su influencia en el juego fue nula.