Ante la actual crisis mundial del coronavirus, ya calificado como pandemia según la Organización Mundial de la Salud, el mundo del deporte sigue inmerso en la toma de decisiones de cara a las próximas semanas. En la jornada de ayer, la Real Federación Española de Fútbol decretó la suspensión de todos los partidos de fútbol y fútbol sala masculino y femenino no profesional de ámbito estatal durante dos semanas. Y, a su vez, la RFEF ha propuesto paralizar también la Primera y Segunda División, todo se decidirá en una reunión en conjunto con LaLiga prevista para hoy a las 12:00 horas, también con la presencia de la AFE, Asociación de Futbolistas Españoles.

Pero antes de saber cuál será la medida oficial para las próximas semanas, La Opinión ha querido testar el estado de ánimo de los aficionados malaguistas en este asunto. La postura de todos es clara: son conscientes del problema de salud mundial que está suponiendo este virus, respetan y acatan todas las restricciones que las instituciones tengan a bien decretar. Eso sí, entre jugar a puerta cerrada y suspender o aplazar los encuentros, optan sin duda por la segunda. Prefieren esperar a que las situación sanitaria sea segura para todos para ya disfrutar de un partido con las gradas a rebosar.

Miguel Molina, de la Federación de Peñas Malaguistas, comprende que la magnitud que está tomando este virus «va a más, pero eso no implica que se celebren los partidos, los partidos no tienen que celebrarse», apunta. «Los aficionados han adquirido unas localidades y el fútbol sin espectadores no es lo mismo, como otro espectáculo. Si se tienen que aplazar que se aplace y que luego busquen las medidas, pero creemos que los partidos se deben suspender», comenta Molina, que no comparte la idea del CSD y del Ministerio de que los partidos se disputen a puerta cerrada.

«Estamos en la última fase y eso puede adulterar el campeonato de Primera o Segunda. Málaga y Huesca se juegan mucho, ellos incluso venían en un avión. Entendemos que no se juegue el partido, pero no que se juegue sin espectadores. Comprendemos y estamos de acuerdo de que ante la magnitud de la pandemia se suspendan todos los actos, hay que dejar los intereses televisivos y económicos de lado», sentencian desde la Federación de Peñas Malaguistas.

Por su parte, Antonio de la Peña Sohail también incide en que se lleven a cabo iniciativas por el bien de todos y atendiendo a la salud pública. «Hay que respetarlo, en otros países han logrado parar las infecciones.Estoy de acuerdo en que lo suspendan, el peligro está para todo», destacada.

Asimismo, además del inconveniente económico para LaLiga y las televisiones, asegura que «ya buscarán dos semanas intermedias antes de que acabe la liga y a ver si en esas semanas se para un poco la expansión, que ya hemos visto que en China y en Corea la curva ya ha descendido. Nosotros como peña queremos ver el partido, y más últimamente que, a pesar de la derrota, hay una comunión y La Rosaleda casi se ha llenado en dos partidos seguidos. Se nota el cambio, porque ahora nos faltan plazas en nuestro autobus que venimos de Fuengirola».

Sobre todo este tema, ayer también se pronunció en los micrófonos de Canal Sur el técnico del Málaga CF, Sergio Pellicer. Para el míster, «este estado de incertidumbre en el que estamos esperamos que se solucione, lo prioritario es la salud. En el aspecto profesional está claro que el fútbol es espectáculo, pasión. El mayor patrimonio son los aficionados y jugar sin aficionados es tremendamente duro. Esperemos que se tomen decisiones y se solucione», remarcó.

En la misma línea, el entrenador castellonense apuntó que «el fútbol es como una obra de teatro, los actores son los futbolistas y si no hay público no sirve absolutamente de nada». Pero también alegó que «lo primero es la salud y en estas situaciones hay que valorar las pequeñas cosas y olvidarse de todos los intereses de las personalidades, mirar el sentido común. Que vaya toda la gente de la mano para que se pueda solucionar lo más rápido posible».