El equipo de gobierno dará prioridad a las partidas sociales y a las inversiones en el presupuesto de 2017, destinándose gran parte de estas últimas a sufragar los daños causados por el temporal del pasado diciembre, unas cuentas que se negocian en estos momentos y cuyo objetivo es aprobarlas con el mayor consenso.

El concejal de Hacienda, Manolo Osorio, destacó que el presupuesto de este año rondará los 235 millones de euros y será «muy similar al del ejercicio anterior puesto que el techo de gasto va a quedar prácticamente igual», en torno a los 190 millones de euros, siendo la prioridad del equipo de gobierno el gasto social. «Son los que priman y evidentemente tenemos que estar apostando por lo social».

Por otro lado, puso el énfasis en las inversiones, que rondarán los 9,5 millones de euros: «Hay cosas que se tienen que llevar a cabo, inversiones ineludibles como el ambulatorio de San Pedro o la pasarela peatonal» en la carretera de Ronda, cuestiones que «tienen que estar más que contempladas en el presupuesto y ahí seguiremos», apuntilló Osorio.

«Marbella siempre tiene esa lupa encima de la cabeza pero hay pocas instituciones de nuestra envergadura que hayan aprobado ya los presupuestos» valoró el edil, quien espera que su aprobación sea «inminente» y «lo antes posible por el bien de todos».

Sobre la tramitación, aclaró que en el momento en el que se haga la aprobación inicial se abrirá un período de exposición pública de 15 días para presentar alegaciones y una vez que éstas se respondan «en mes o mes y medio se hace la aprobación definitiva». «Es importantísimo puesto que afecta a las licitaciones, que salen más tarde y esos plazos tenemos que tender a acortarlos al máximo».

Osorio achacó el retraso en la aprobación de las cuentas de este año al retraso del Gobierno central en aprobar los presupuestos y fijar el techo de gasto y a las negociaciones que el tripartito está manteniendo con todos los grupos municipales para aprobar los presupuestos por unanimidad y de manera consensuada.

Asimismo, Osorio destacó que el retraso también se ha debido a la pluralidad de la corporación donde «todos tenemos que aportar y queremos poner nuestro granito de arena», por lo que el equipo de gobierno se ha reunido con los partidos de la oposición.

En este sentido, subrayó que se han recogido las peticiones de los grupos opositores y se llevarán a cabo en función de su viabilidad: «Yo, que llevo el área de Hacienda, procuraré que sea factible lo máximo posible y me encantaría que se aprobase por unanimidad. Eso significaría que hay consenso».

En este sentido, el concejal destacó la dificultad de negociar con Costa del Sol Sí Puede (CSSP), grupo que ha solicitado 10 puntos para apoyar las cuentas y que en realidad «se trata de 10 capítulos con más de una docena de subpuntos, es decir, cientos de peticiones exigidas para que se posicionen a favor de los presupuestos», muchas de las cuales, a su juicio, muestran el desconocimiento del colectivo de la gestión municipal.

Así, señaló que, por un lado, «rechazan las privatizaciones de servicios, y por otro, exigen la contratación de personal externo del Ayuntamiento para revisar las concesiones». Del mismo modo, «solicitan que se soterren los cables de alta tensión cuando ya están incluidos en las inversiones» o «exigen que se inviertan dos millones de euros en la construcción de un bulevar en la Milla de Oro».

Osorio remarcó que estos son unos presupuestos de consenso para los que se han tenido que viabilizar propuestas de PSOE, IU y OSP, «cediendo todos un poco», y aludió a la «actitud de diálogo y consenso» del grupo sampedreño.

Por su parte, el alcalde, José Bernal, declaró el pasado viernes que «prácticamente la totalidad de las inversiones en los presupuestos son para arreglar los destrozos del temporal», para lo que el Ayuntamiento ya ha destinado casi un millón en obras de mejora al no haber recibido aún los ingresos prometidos por el Gobierno central.