­Dos hombres han fallecido en los últimos años tras sufrir un infarto en Alhaurín de la Torre y esperar 45 minutos a la llegada de una ambulancia. Por una circunstancia parecida, tras esperar más de una hora, una niña perdió una importante cantidad de sangre en Alhaurín el Grande. Así lo exponen los alcaldes de ambos municipios, que junto a otros regidores del Guadalhorce y los sindicatos denuncian el déficit y la saturación de las urgencias en la comarca.

Regidores de distinto signo político se unen para advertir de una situación que consideran crítica. En la comarca del Guadalhorce hay censados unos 110.000 habitantes de los 13 municipios, atendidos por siete ambulancias medicalizadas 24 horas.

Álora, Ardales, Pizarra, Coín, Alhaurín de la Torre, Alhaurín el Grande, Cártama, Guaro, Monda, Tolox y Yunquera lamentan la saturación de las ambulancias de urgencias cuando coinciden más de siete casos, en una comarca que califican de «dispersa», a una hora de distancia del hospital más cercano.

La reciente apertura del Caminito del Rey también ha ocasionado en los últimos meses colapso en las ambulancias de urgencias, según informan los regidores de Ardales y Álora. El munícipe de esta última localidad, José Sánchez (PSOE), señaló la ola de calor del pasado mes de mayo que provocó la ocupación de más de la mitad de las ambulancias de la comarca. «Nos encontramos en una situación extrema», lamentó.

Otro de los hándicaps de esta comarca es el Centro Hospitalario de Alta Resolución de Especialidades (Chare) del Guadalhorce, cuya apertura está en el aire, a pesar de estar terminado desde hace años. Alcaldes y sindicatos consideran que su puesta en marcha descongestionaría el servicio de urgencias. La Consejería de Salud anunció el pasado año que abriría el centro de manera paulatina en 2015, pero aún continúan las reuniones entre administraciones y empresas privadas para tratar las cuestiones pendientes.

El secretario general de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Málaga, Rafael González, insistió en la necesidad de una dotación de ambulancia adicional hasta que se abra el hospital, pero sobre todo en la premura de abrir el centro. «Hay 100.000 urgencias y 60.000 intervenciones quirúrgicas que se atienden en el hospital Clínico de Málaga al año que vienen del Guadalhorce; que abra es importante para la comarca y para los malagueños», apostilló.

La delegada de CCOO en el Guadalhorce, Trinidad Salcedo, indicó que los dispositivos son «insuficientes» tanto en el centro de salud como en las ambulancias de urgencias. «He trabajado en Álora como enfermera y cuando había que rescatar a escaladores pasábamos ocho horas fuera con las urgencias del centro de salud desatendidas», explicó.

Ambulancias de traslado

Salcedo denunció además la utilización de las dos ambulancias de traslado con las que cuenta la comarca para urgencias «cuando no están disponibles las medicalizadas». «¿Cómo vas a mandar al conductor sólo a ver un paciente como si fuera una prioridad cuatro y tal vez es una prioridad dos o uno?», se preguntó.

El delegado de UGT en el Guadalhorce, Juan Miguel Rebollo, indicó que «los profesionales sanitarios sufren todo el peso».

Los alcaldes de los municipios del Guadalhorce reclaman a la Consejería de Salud una solución inmediata. Pero fuentes del Distrito Sanitario Guadalhorce aseguraron a La Opinión de Málaga que «no hay saturación en las urgencias y que los recursos de ambulancias son suficientes». En cuanto al refuerzo, apuntan que siempre que ha sido necesario se han tomado medidas «como en la época de alta frecuentación, pero actualmente no es necesario».

Algunos municipios de esta comarca no sólo temen por el déficit de las ambulancias de urgencias, sino también por la necesidad de más médicos de familia o especialistas. Es el caso de Alhaurín de la Torre. Su alcalde, Joaquín Villanova (PP), considera que para sus 39.000 habitantes son necesarios más médicos de familia y pediatras. De hecho, han ofrecido a la Consejería terrenos para ampliar el centro de salud.

Del mismo modo, el regidor de Alhaurín el Grande, Juan Martín Serón, señaló: «La lista de espera es de tres o cuatro días porque se necesitan más médicos». Y la munícipe de Guaro, Noé Oña (PSOE), pide asistencia 24 horas para atender a más de 100 ancianos de la residencia de la localidad.