Siete cohetes marcaron el miércoles el inicio oficial de las fiestas de Antequera, que cumplen 268 años de historia. Miembros de la corporación municipal, acompañados por la regidora de esta edición, Pilar Parejo García y su manolas, estuvieron presentes en el comienzo de esta feria estival, donde también, como ya se llevan haciendo desde hace algunos años, han participado emigrantes antequeranos que en la actualidad residen fuera de la ciudad pero que suelen regresas estos días de agosto para estar con amigos y familiares disfrutando de las ferias. Este es el caso de Juan Manuel y Carmen, que como recordó el alcalde de Antequera, Manolo Barón, llevan «muchísimo años» lejos de su ciudad. Él en Valencia. Ella en Francia. «Vuelven porque son de raíces antequeranas y profundamente amantes de nuestra tierra». Tras la inauguración oficial fue el turno para el descubrimiento de una placa en homenaje a Rodolfo Rodríguez El Pana, tras su fallecimiento el pasado mes de junio en Guadalajara (México). El torero, a comienzos de mayo, sufrió una grave cogida en una corrida celebrada también en el país azteca, en la ciudad de Durango, por la que quedó tetrapléjico.
