Una escalera metálica permitirá el acceso a la Alcazaba de Antequera durante las obras de mejora de accesibilidad

El alcalde de Antequera, Manolo Barón, la teniente de alcalde delegada de Turismo, Ana Cebrián, y el concejal de Patrimonio Histórico, José Medina Galeote, han informado esta mañana sobre el avance de la obra de accesibilidad de la Alcazaba con la instalación del ascensor.

Tal y como ha explicado el primer edil, para permitir que se mantengan los recursos turísticos abiertos se ha incorporado una escalera metálica para el acceso de los visitantes. “Hemos dispuesto esta instalación absolutamente efímera y absolutamente provisional, que va a permitir que las personas puedan subir por ahí”.

Una de las principales preocupaciones a la hora de llevar a cabo las obras era permitir que la entrada de visitantes “siguiera en movimiento”. “No podíamos en ningún momento dejar un recinto como es la Colegiata y el recinto de la Alcazaba, desprovisto de un acceso”, ha explicado el concejal de Patrimonio Histórico, José Medina Galeote.

La estructura, que es una escalera metálica provisional totalmente homologada, ha supuesto una inversión en modo de alquiler , siendo el ayuntamiento el encargado de sufragar íntegramente todo ese gasto durante el tiempo que dure la obra, aproximadamente hasta el mes de diciembre.

“Ahora es cuando más gente nos visita y desde luego no íbamos a tener la alcazaba cerrada ni un día más. Se ha conseguido llegar a tiempo, esperamos que la obra siga su curso y termine en tiempo y forma”, ha añadido la teniente de alcalde delegada de Turismo, Ana Cebrián.

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Sobre la obra

El principal objetivo del proyecto, redactado por el Ayuntamiento de Antequera, es la mejora de las condiciones de accesibilidad de la Alcazaba, buscando el establecimiento de itinerarios accesibles desde el exterior al interior, y una vez alcanzado el interior, de las sendas y escaleras interiores que permitan la puesta en valor del monumento para todos los visitantes.

Paralelamente, se pretende incrementar la calidad visual, especialmente en la zona colindante a la Colegiata de Santa María la Mayor, mediante un tratamiento en barandillas, protecciones y elementos de jardinería de la fachada oeste del monumento.

Asimismo, se instalará un ascensor con capacidad para diez personas, al que se accederá desde la calle Colegio, para salvar toda la zona de escalinatas del primer tramo de la visita, la zona más incómoda para el visitante. De esta forma, se podrá acceder desde el Arco de los Gigantes hasta el hasta el primero de los patios superiores.

Además, se dispone de una parada intermedia para que el visitante pueda llegar a la zona sobre el Arco de los Gigantes, desde donde se aprecian vistas de Antequera y que es inaccesible en la actualidad para personas mayores o personas con discapacidad física.

Por otro lado, se realizarán mejoras en el sendero existente junto a la Colegiata de Santa María para facilitar el recorrido de los visitantes por la Alcazaba en su paso por la zona este del recinto. El sendero actual se encuentra en mal estado, con una pendiente bastante pronunciada y un pavimento con zonas degradadas por las escorrentías de la lluvia, por lo que se plantea rellenarlo con zahorra compactada y un pavimento terrizo estabilizado para suavizar la pendiente.

Además, se creará una plataforma-mirador con vistas hacia la Plaza de los Escribanos y el yacimiento arqueológico de las Termas de Santa María, así como hacia la fachada de la Colegiata y hacia la Peña de los Enamorados y el barrio del Carmen.

Para acompañar el sendero en rampa y mejorar la accesibilidad se incorporará una barandilla integrada en el entorno. Finalmente, para mejorar la calidad visual de la zona desde el entorno próximo de la Alcazaba y la Plaza de Santa María, se desbrozará el talud lateral hacia la colegiata y se tratará con vegetación arbustiva.