El famoso socavón en la calle Victoria calle Victoria se ha convertido en una oportunidad de oro para el Ayuntamiento. Es la primera vez que se puede plantear un experimento de una posible peatonalización sin problemas. No hace falta hacer estudios de tráfico, sólo comprobar la experiencia. Y como vecino, la experiencia me convence.

Para esto, como en todo, hay gustos variados. Seguro que alguien saltará con que quiere que sigan pasando los coches y encima no será vecino de la calle, sino que necesitará pasar por allí para ahorrarse camino. Pero lo mejor es analizar un poco la situación.

Soy vecino de la calle Victoria. Aparco el coche en la calle Agua. Durante los últimos días he escuchado los pájaros en la calle por primera vez. No sé hasta qué punto se puede considerar un argumento de peso, pero para mí ha sido toda una sorpresa. Nunca pensé que eso pudiera ser posible allí. Además, el hecho de subir andando y ver cómo la gente ocupaba el ancho de la vía mientras paseaba era una demostración de que peatonalizar la calle sería una buena opción.

El silencio y la tranquilidad que se respiraba en la calle eran algo desconocido en una vía que suele ser ajetreada y áspera para el peatón, con aceras estrechas, contenedores de basura llenos y difícil de cruzar de un lado a otro.

Quizá la peatonalización total no sea necesaria. Se podría plantear en el tramo superior de la calle, para dejar la salida del tráfico desde la calle Huerto del Conde, como hasta ahora. También habría que prever el paso de los vecinos con aparcamiento -que al final es un tránsito mínimo- y de los servicios públicos.

Tanto el Camino Nuevo, como Huerto del Conde, Lagunillas o la Cruz Verde se ofrecen como opciones de acceso a la zona, sin necesidad de cargar el tráfico por la calle Victoria. Además, hay que recordar que esta vía está dentro del «Entorno de Interés Protegido» que la Junta de Andalucía determinó para el Centro Histórico. Su interés turístico, mayor del que parece por la basílica de la Victoria y San Lázaro, se reforzaría y la calle ganaría parte de su gloria perdida.