TIPP: libertad o capital, por Cristina Castro

Es increíble como algunos partidos políticos se enorgullecen de haber creado empleo, cuando el empleo que ha surgido en estos últimos años ha sido tan precario, de tan baja calidad, que más que crear empleo se ha creado una nueva clase social, esclavos empleados. Y parece ser que en esta dirección va el mundo, mientras en España luchamos por un cambio que mejore la situación económica y social, en Europa debaten, en absoluto secreto, si aceptar o no un tratado que atenta directamente contra los derechos de los trabajadores, y libertades de las personas. El TTIP no solo es una amenaza para la salud, en cuanto a que Europa quedaría abierta a químicos alimenticios dañinos para la salud que ahora mismo están vigentes en USA, sino que también atenta directamente al Estado. El TTIP propone que los servicios sociales que ahora son públicos en Europa, pasen directamente a ser privados. Esto representa el capitalismo más extremista y dañino, un capitalismo que pretende dar preferencia a los beneficios de las empresas antes que a la libertad de los Europeos. El TTIP es, en definitiva, una amenaza para la democracia y la libertad, y la simple posibilidad de replantearse su aprobación, supone un insulto hacia siglos de luchas del pueblo europeo a favor de la libertad y los derechos sociales de la mayoría trabajadora.