Spiderman pasó por la Planta Cuarta mientras muchos dormían. Después de un largo día de juego y lucha todos agarraban con fuerza la mano de sus abuelos y sus padres que hacen guardia, como esos cuatro angelitos, a los pies de la cama.

De puertas para fuera, el héroe es Spiderman; de puertas para dentro, el personaje de ficción es sólo un hombre de corazón inmenso escondido bajo una máscara azul y roja que visita y rinde pleitesía a los héroes de verdad. A los que dan el callo cada día y no pierden la sonrisa.

Oncología Infantil son dos palabras que nadie en este mundo debería pronunciar jamás pero la realidad es la que es. El Materno Infantil de Málaga atiende a los pacientes más fuertes del mundo, pero además cuenta con un batallón de legionarios que dedica su tiempo a hacer más llevadera la enfermedad de todos esos menores que tienen que estar en la Planta Cuarta. Los voluntarios de AVOI, personas como tú y yo que deciden invertir su tiempo en la felicidad de los demás, han apostado por poner sonrisas en las caras de quienes nunca debieron perderlas. Si los pacientes son héroes, los voluntarios de AVOI son sus capas y sus superpoderes.

Mientras los pequeñajos pasan el tiempo entre tratamientos en la ludoteca o en la cama, son los adultos los que peor lo pasan. Nosotros, en nuestra buscada complicación vital, tratamos de encerrarnos en darle vueltas a la injusticia de que un niño tenga que pasar por algo como esto. Es fácil decirlo desde aquí, alguien que no pasa las horas sentado al pie de la cama, lo sé, pero tienes que estar tan fuerte como él, tiene que ver en ti a un compañero en una aventura de la que no podrá salir sin ti.