La crisis sanitaria provocada por la Covid-19 supone la aparición de una serie de amenazas, pero también oportunidades para los próximos años, que exigen la puesta en marcha de medidas concretas y acciones estratégicas que contribuyan a superar esta situación.

Durante estos meses de pandemia se ha visto afectada nuestra salud y nuestra economía, y se ha puesto en duda nuestro modelo de vida y de desarrollo. Hemos visto que se han acelerado, al menos cinco años, los procesos de digitalización de nuestra vida social y de nuestras empresas, y además hemos observado que aquellas empresas más digitalizadas han superado con creces su debilidad económica frente a la pandemia, que aquellas que no lo eran y no lo estaban.

La ciudad de Málaga frente a estos nuevos horizontes tiene buenas oportunidades para desarrollarse alrededor de las tecnologías digitales. Bajo mi punto de vista, la reanimación de la economía malagueña está muy ligada a la digitalización de los sectores productivos locales, como son el turismo, la construcción, el agroalimentario, la movilidad, y cómo no, el sector sanitario.

Málaga tiene un buen sistema de innovación, representado por diversas infraestructuras e instituciones, como son, el Parque Tecnológico de Andalucía y sus empresas más innovadoras aglutinadas en clústeres de tecnologías digitales (Inteligencia Artificial, Big Data, Blockchain, Ciberseguridad, vehículo conectado, sistemas aeroespaciales y tecnologías ferroviarias) y alrededor del Málaga Techpark Execs -el club de empresarios del PTA-, que reúne a las 50 empresas más relevantes del parque con el objeto de reforzar el ecosistema del PTA, constituyéndose como un foro empresarial de encuentro, reflexión y debate alrededor de un objetivo común: promover la I+D y el desarrollo tecnológico en Málaga; la Universidad de Málaga (UMA) y sus centros de investigación, como elemento de referencia en la creación de talento y en la transferencia de tecnología; el Ayuntamiento de Málaga con FYCMA, el Polo de Contenidos Digitales y sus incubadoras de empresas; la Cámara de Comercio y la Confederación de Empresarios de Málaga con sus programas de apoyo a las empresas; la Diputación de Málaga; el Clúster Andalucía Smart City; BIC Euronova; la Fundación Fimabis con IBIMA y Bionand; y la Fundación Ciedes como elemento de coordinación de todas estas entidades.

La vertebración de todo este ecosistema de innovación para ayudar a nuestras empresas a desarrollar sus procesos de digitalización es una oportunidad única, alrededor de un instrumento que las vertebre como es la consolidación de un Digital Innovation Hub (DIH), que permita presentar proyectos a las distintas administraciones para conseguir este objetivo.

Este DIH alrededor de las tecnologías digitales, tiene como objetivo unir a todas las entidades proveedoras de conocimiento y tecnología e involucrar a las empresas, instituciones y a todos los agentes del sistema de innovación y conocimiento de Málaga y de Andalucía, para contar con un amplio catálogo de servicios e infraestructuras de validación y testeo que ayuden a la transformación digital de las empresas, fundamentalmente PYMES, pudiendo optar a formar parte de la Red Europea de Digital Innovation Hubs y a las ayudas europeas y nacionales destinadas a esos DIH.

Por otro lado, la cooperación entre el mundo empresarial tecnológico con la Universidad de Málaga, a través de un Centro Tecnológico, también representa una gran oportunidad para incrementar el desarrollo de proyectos y la captación de fondos para proyectos de I+D+I que ayuden al fortalecimiento del sistema y del tejido tecnológico de la ciudad.

La atracción de talento y con ello, la atracción de empresas innovadoras y startups a Málaga es clave para el desarrollo de los sectores tecnológicos. Por ello, Málaga debe convertirse en una de las principales concentraciones de talento en tecnología e innovación de Europa, siendo la formación y capacitación en habilidades digitales fundamentales en todo este proceso.

El carácter internacional de Málaga también es un factor muy importante en el contexto actual en que nos encontramos para superar esta crisis. La proyección de las empresas hacia el exterior, la captación de empresas innovadoras de todo el mundo, la participación en programas a nivel europeo, la cooperación con otros países más allá de la Unión Europea, y la potenciación de las redes internacionales (IASP, ERRIN, Redes del Magreb, asiáticas y latinoamericanas), y el fortalecimiento del Grupo de Estrategia Internacional Conjunta (GEIC) de la ciudad, deben formar parte de toda esta estrategia que contribuya a la transferencia de los conocimientos tecnológicos y el fomento de la capacidad de colaboración empresarial en un marco cada vez más internacional.

La reactivación económica de Málaga, en definitiva, debe estar basada en una estrategia de refuerzo del sistema de innovación malagueño, en la que la digitalización, el apoyo a las PYMES, el fortalecimiento tecnológico entre empresas y la Universidad de Málaga, donde destacaría la Inteligencia Artificial en la que Málaga debería tener una estrategia propia, la atracción de talento, de empresas innovadoras y proyectos de I+D+I, así como la potenciación de las redes internacionales juegan un papel decisivo.