Obtuvo el premio a la mejor película en el Festival de Cine Europeo de Sevilla y formó parte, lo que ya es un signo de calidad, de la sección oficial de Cannes. Es la tercera película de la directora francesa Justine Triet, tras La batalla de Solferino y Los casos de Victoria y se acerca a la figura de una sicoterapeuta, Sibyl (Virginie Efira), que decide dejar a todos sus pacientes para retomar una de sus grandes pasiones: la escritura.

De manera inesperada aparece Margot (Adèle Exarchopoulos) en su consulta, una prometedora actriz inmersa en un gran conflicto personal y que Sibyl usará como fuente de inspiración para escribir su propia historia. Fascinada con ella y sus problemas, descubrirá que el presente de Margot hará revivir antiguos recuerdos de Sibyl que la pondrán cara a cara con su pasado.

Preguntada en una rueda de prensa por lo que hay de suyo en el personaje de Sibyl, la cineasta afirmó que podía asegurar que ella no era la protagonista. «Mi coguionista Arthur Harari y yo -recalcó- nos divertimos mucho profundizando en esta ficción, haciendo daño deliberadamente a nuestros personajes. Así que, al final, mi sensación es que no se parecen a mí en nada. Desde que empecé a escribir el guion, la película de Woody Allen Otra mujer me perseguía. Es extraño porque no es una película que me encante, pero sí me fascina su hilo narrativo principal: una mujer buscando la calma y la inspiración frente a otra mujer que la sumerge en un abismo vertiginoso que hace que su vida se rompa en dos. Esa película fue mi referencia inicial».

Respecto a si profundizó mucho en el tema del psicoanálisis, dijo que no. «Simplemente -respondió-estuve con algunos psiquiatras a los que les pregunté si en alguna ocasión habían tenido experiencias inquietantes con algún paciente. Uno de ellos me confesó que su padre había pasado por una enfermedad grave a la misma vez que una de las personas a las que trataba. De hecho, su padre murió antes y tuvo que poner fin a estas sesiones porque se sentía extremadamente maltratado por su paciente. Esto alimentó el guion. También lo hizo la serie de televisión In treatment sobre un grupo de psicoterapeutas».