El calentamiento global comenzó hace 180 años, mucho antes de lo que hasta ahora se creía, y se debió al impacto que tuvo en el clima la revolución industrial, según un estudio internacional publicado por la revista científica "Nature".

La Universidad Libre de Berlín, una de las instituciones participantes en la investigación, avanzó hoy que ésta es la principal conclusión de un estudio pionero del "archivo natural del clima" de los últimos 500 años (corales tropicales, núcleos sedimentarios, estalagmitas, anillos en troncos y hielos) en ambos hemisferios.

Además, el estudio -dirigido por Nerilie Abram de la Universidad Nacional de Australia en Canberra- recoge el análisis de distintos modelos de evolución del clima a lo largo de miles de años.

"Las investigaciones muestran que el calentamiento de la Tierra guarda relación desde el principio con el aumento de la concentración de gases de efecto invernadero consecuencia de la revolución industrial", explicó en un comunicado Jens Zinke, paleontólogo de la Universidad Libre de Berlín y coautor del estudio.

Antes de la revolución industrial la cantidad de gases de efecto invernadero (como el CO2) se encontraban en la atmósfera en una proporción comparativamente baja.

Según el estudio, a partir de 1830, coincidiendo con los primeros pasos de la revolución industrial en Europa Occidental, comenzó a percibirse un aumento de las temperaturas, primero en el Ártico y en las zonas tropicales de los océanos, y posteriormente en Europa, Asia y Norteamérica.

Cincuenta años más tarde comenzó a ser evidente el inicio del cambio climático en gran parte del hemisferio sur, según el equipo científico, que achaca estas diferencias temporales a las corrientes marinas.

El principal aporte de este estudio es la inclusión de gran cantidad de registros del "archivo natural del clima" del hemisferio sur y su comparativa temporal con los del norte.

Los científicos extraen además dos consecuencias de su descubrimiento: la confirmación de la mano del hombre tras el cambio climático y la necesidad de revisar las predicciones sobre el calentamiento global para las próximas décadas teniendo en cuenta que no es un fenómeno iniciado en el siglo XX, sino en el XIX.