Un avión de pasajeros Airbus 321 en el que viajaban 152 personas y cuyo destino era la capital paquistaní, Islamabad, se estrelló ayer, hacia las 6.45, hora española, terminando con la vida de todas las personas a bordo. En principio, el accidente se habría producido por el mal tiempo que había en la zona, aunque el presidente de la Asociación de Pilotos de Pakistán (PALPA), capitán Sohail Baloch, aseguró que el siniestro podría deberse al cansancio del piloto.

Las autoridades paquistaníes confirmaron que no hubo supervivientes en el peor accidente aéreo en Pakistán, aunque anunciaron que ya se ha recuperado la caja negra del avión. Se espera que de su registro se obtengan datos importantes. Aún no está claro cómo se examinará la caja negra, ya que no hay instalaciones en el país que puedan descodificar su información.

Entre las víctimas hay dos norteamericanos, según indicó un portavoz de la Embajada estadounidense que no dio más detalles. «No hay supervivientes. Creemos que todos están muertos. Estamos recuperando los restos de los cadáveres», indicó el presidente de la Autoridad para el Desarrollo de la Capital, Imtiaz Elahi. El avión, perteneciente a la compañía privada Airblue, se estrelló contra una ladera de difícil acceso mientras volaba desde Karachi.

Al cierre de esta edición, se habían recuperado 90 cadáveres, pero el mal tiempo dificultaba los esfuerzos de recuperación. «Hemos suspendido la operación aérea por la lluvia. Llevará mucho tiempo limpiar la zona. No hay forma de transportar los cadáveres desde el lugar del accidente excepto mediante helicópteros, e incluso estos no pueden aterrizar allí», afirmó un responsable de la administración local, Aamir Ali Ahmed.

Los equipos de rescate explicaron que tuvieron que cavar a través de los escombros con sus manos, mientras las llamas y el humo espeso dificultaban las labores de rescate. Aunque el fuego fue extinguido casi de inmediato, el acceso a la ladera aún está limitado a quienes vayan a pie y a los helicópteros. «Encontramos pocos cadáveres intactos. Básicamente, estamos recogiendo partes del cuerpo y poniéndolas en bolsas», indicó un oficial de Policía, Bin Yameen. El avión perdió contacto con la torre de control del Aeropuerto Internacional de Islamabad a las 6:43, hora española, debido al mal tiempo.

«Inexplicable»

«Al piloto se le dio instrucciones para que aterrizara en la pista I o bien en la II», aseguró el ministro del Interior, Rehman Malik. «El avión estaba a unos 792 metros antes de aterrizar pero, de pronto, subió a más altura, algo inexplicable», añadió. «Si la visibilidad de la pista era escasa, entonces debería haber sido desviado», prosiguió.