Los Mossos d´Esquadra detuvieron ayer a una madre de 22 años por la muerte de sus dos hijos gemelos recién nacidos, que fueron hallados el pasado jueves sin vida en el interior de un piso del distrito de Nou Barris de Barcelona.

Según informaron fuentes cercanas al caso, los bebés fueron encontrados poco después de las 19.30 horas sin vida y sin signos evidentes de violencia en el interior del piso, junto a la madre, que fue trasladada de forma inmediata a un hospital porque había sufrido una fuerte hemorragia durante el parto, que al parecer tuvo lugar en la propia vivienda.

Detención

La madre, Francisca S.M., de 22 años, de nacionalidad española y vecina de Barcelona, fue finalmente detenida ayer por la tarde por los Mossos d´Esquadra, a pesar de permanecer en el hospital custodiada por la policía autonómica catalana.

Los Mossos han abierto una investigación y están a la espera de que la autopsia determine la causa exacta de la muerte de los gemelos. Según fuentes cercanas al caso, el Servicio de Emergencias Médicas (SEM) recibió a las 19.21 horas del martes una llamada de alerta efectuada por una vecina advirtiendo de que la joven sufría una fuerte hemorragia. Fue la propia abuela de los bebés fallecidos la que solicitó la ayuda de su vecina cuando se topó con la escena al regresar a casa. Cuando los equipos de emergencia médica llegaron al inmueble, a las 19.32, encontraron a la joven en medio de un charco de sangre, debido a la hemorragia interna producida durante el parto, y a los dos bebés ya fallecidos, por lo que dieron aviso a los Mossos d´Esquadra.

Al parecer, según las mismas fuentes, la madre aseguró que no sabía que estaba embarazada, aunque ya se encontraba en la fase final del periodo de gestación. Cuando los Mossos d´Esquadra llegaron al piso, ya había familiares de la joven en el inmueble, aunque por ahora se desconoce si en el momento del parto la madre estaba sola o acompañada.

Los Mossos mantienen varias hipótesis abiertas, ya que la autopsia deberá dilucidar, entre otras alternativas, si los bebés nacieron muertos o si hubieran sobrevivido en un parto correctamente atendido. Por otro lado, las fuentes añadieron que la obesidad de la joven pudo ayudar a que ocultara su embarazo, ya que ni los familiares con los que convivía ni los vecinos consultados estaban al tanto de su embarazo.