Los clubes de fútbol profesionales tenían una deuda de 607,36 millones de euros con la Agencia Tributaria a finales del mes de abril, según datos facilitados por el Gobierno al coordinador de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, en respuesta a una pregunta que registró el Congreso. En concreto, la deuda agregada de los clubes de fútbol profesionales gestionada por la Agencia Tributaria asciende, a 30 de abril de 2008, a 607.357.484,01 euros.

Sin embargo, este no es el total de la deuda, ya que a esa cantidad hay que sumar lo que deben a la Seguridad Social, aunque el Ejecutivo no quiso especificar la cuantía exacta, ya que esos datos tienen "carácter reservado", de acuerdo con la Ley General de Seguridad Social y la Ley de Protección de Datos.

La Agencia Tributaria previsiblemente no podrá recuperar toda la deuda, ya que hasta seis clubes de fútbol profesionales han presentado hasta el momento concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos y ahora conocida como Ley Concursal), lo que conlleva sólo el pago de una parte de lo que deben a los acreedores para poder salir a flote.

El Gobierno también especifica en su respuesta escrita que "debido al carácter universal de este tipo de procedimientos, donde hay una pluralidad de acreedores, no se puede conocer hasta qué punto ha sido determinante la deuda pendiente con la Hacienda Pública para motivar esta situación".

En los seis casos en que los clubes de fútbol profesional han sido declarados en concurso "la Agencia Estatal de Administración Tributaria está personada en el procedimiento por tener créditos reconocidos en el mismo". Unos créditos que deben ser devueltos al organismo público.

En su respuesta al coordinador de IU, el Ejecutivo se negó a facilitar de forma individualizada la deuda particular de cada uno de los clubes, ya que ese tipo de información tributaria también tiene carácter reservado de acuerdo con la Ley de Protección de Datos, por lo que sólo puede ser utilizada por la Agencia Tributaria para el desempeño de sus funciones de gestión de tributos e imposición de sanciones.